¿Qué provocó el incendio de la avenida Alcalde Pérez Ardá de A Coruña?

Nuria Guillermo / Ana Villagrasa A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

La uralita que ardió durante el incendio de la avenida Alcalde Pérez Ardá se encuentra situada en el tejado de un bajo.
La uralita que ardió durante el incendio de la avenida Alcalde Pérez Ardá se encuentra situada en el tejado de un bajo. ANGEL MANSO

Los vecinos del edificio apuntan a que el fuego, iniciado en una uralita alojada en el patio interior, fue intencionado

11 may 2022 . Actualizado a las 14:58 h.

Sobre las 16.00 horas de este martes, una intensa humareda negra se desplegó por el cielo de A Coruña. El humo, que podía verse desde varios puntos de la ciudad, procedía de un incendio en un edificio de la avenida Alcalde Pérez Arda, próximo al cruce con la ronda de Outeiro. La Policía Local y los bomberos desconocen qué ocasionó las llamas, que se iniciaron en una uralita localizada en el patio interior del edificio. Sin embargo, los vecinos apuntan a varias posibles causas.

Delia Patiño, una de las residentes del edificio, explica que hay «okupas que se meten en el bajo», localizado debajo de la uralita que ardió durante el incendio. «Creemos que pudieron ser los okupas los que lo provocaron, porque a veces hay gente que se mete ahí abajo». También comenta que, desde el desalojo que se llevó a cabo en el edificio contiguo hace unos meses, «se cortan un poco más y la situación está algo más tranquila», pero insiste en que continúan entrando en la parte baja de la edificación. 

Sin embargo, el resto de vecinos consultados —que prefieren permanecer en el anonimato—inciden en que, actualmente, la situación está tranquila y no hay okupas en el bajo del edificio. Estos residentes creen que el incendio pudo ser intencionado, al haberse iniciado en la uralita que conforma el tejado del bajo, y sostienen que la puerta está tapiada y no se puede acceder al interior.

Por su parte, los comerciantes cuyos negocios están en las proximidades del edificio también sostienen que la zona está mucho más tranquila desde que tapiaron la construcción contigua, y que, desde entonces, no se ven okupas por la zona. José Antonio Balza, propietario de la lavandería Lavaggio localizada en el avenida, coincide con los residentes al pensar que las llamas pudieron ser provocadas. «Lo que ardió fue el plástico de la uralita. Sería interesante saber lo que pasó, porque la uralita no prende sola», afirma.