La temperatura cercana a los 25º empujó a la gente a salir de sus casas y abarrotar playas, parques, calles y terrazas en una jornada en la que el Día da Ciencia na Rúa convocó a cientos de familias en Santa Margarita
07 may 2022 . Actualizado a las 18:48 h.Encontrar una terraza libre en la que disfrutar de un refrigerio y un aperitivo con el que reponerse del calor resultó casi una odisea durante buena parte de la jornada de este sábado. La ciudad se echó a la calle incluso antes de que los termómetros se acercasen a los tan ansiados 24º que Meteogalicia pronosticó para este día y que suponían un anticipo del verano —a las 13.20 horas la estación meteorológica de la torre de Hércules marcaba 20,6º mientras que en la de Guísamo ya se superaban esos 24º—. Con ese vaticinio, los arenales fueron llenándose poco a poco de coruñeses ávidos por lucir moreno hasta que por la tarde, con el termómetro escalando a pesar de la aparición de alguna que otra nube, la estampa bien podría ser la de un día cualquiera de verano. Con más de un mes por delante para que la estación estival entre en juego de manera oficial, sorprendió ver la intensidad de tráfico que se registró a mediodía en A Pasaxe en dirección a las playas del área metropolitana.
Igual de «achicharrados» que en los arenales estaban los niños que acudieron acompañados de sus padres al parque de Santa Margarita para celebrar el Día da Ciencia na Rúa. «¡Y menos mal que aquí hay sombra!», comentaba Mayra Montes, una madre que reconocía que «ya había ganas de que volviesen actividades como esta. Se nota tanto en los que están en los estands como en los niños, que están probándolo todo». Su hijo, Leo Martínez, disfrutó con los experimentos en los que pudo participar. «En uno cogías una pinza y la energía eléctrica pasaba por tu cuerpo hasta salir por el dedo para tocar un piano», explicó el pequeño de 8 años, no sin advertir que «todavía he visto muy pocos». El Instituto de Investigación Biomédica de A Coruña (Inibic) no quiso faltar a la cita y realizaron experimentos con los que explicaron fenómenos asociados a las reacciones químicas o cuestiones como el crecimiento de las bacterias, las leyes de Mendel o la insuficiencia cardíaca.
La Marina fue otro de los puntos neurálgicos del día. Las terrazas se llenaron no solo con coruñeses, sino también con un gran número de turistas que viajaban a bordo del Aurora, el vistoso crucero que atracó a primera hora en el muelle de Trasatlánticos y también de los curiosos que no quisieron perderse la visita del Tiger y el Leopard, dos buques de entrenamiento de la Armada francesa que permanecerán atracados en el muelle de Calvo Sotelo hasta mañana.
La música también estuvo presente en esta jornada de buen tiempo. El Campo da Leña acogió a las 13.00 horas el concierto de Sokie y a las 20.00 está previsto el de Adhara & Ritman. Y a partir de ahí, con la temperatura ya descendiendo, la ciudad se despedirá del que fue el primer anticipo del verano.