Cerveza al sol y compras: así pasan el tiempo los cruceristas que llegaron a A Coruña este sábado
A CORUÑA CIUDAD
Las calles se llenaron con con los viajeros que llegaron en el Queen Elizabeth y el Mein Schiff 4
30 abr 2022 . Actualizado a las 17:15 h.Dos grandes cruceros atracaron este sábado durante unas horas en el puerto de A Coruña, el mítico Queen Elizabeth y el Mein Schiff 4, ambos con una eslora de 294 metros. Llegaron un total de 3.000 pasajeros y 1.700 tripulantes que partirán hacia su nuevo destino a las 17.00 horas. Fue el colofón a un mes de abril en el que la ciudad recibió un total de 19 barcos llenos de turistas.
Aprovechando el buen tiempo y el calor, muchos de los extranjeros que pisaron tierra firme decidieron aprovechar la mañana para sentarse en una terraza y disfrutar de una cerveza tranquilamente. Tal era la cantidad de gente que andaba por la calle que hubo establecimientos de hostelería con cola para poder coger una mesa libre.
No fue el caso de Jennifer, que consiguió sentarse junto a su marido en un local de O Parrote a tomar unos refrescos. Esta mujer explicó que su plan en la ciudad era «tomar algo e ir de compras». Esta ciudadana inglesa llegó al puerto en el Queen Elizabeth, siendo A Coruña la última parada del crucero, tras haber estado en lugares como La Spezia, Cartagena o Barcelona.
Otros eligieron un plan todavía más sencillo: sentarse en un banco al sol de la Marina y disfrutar de las vistas. También los hubo más atrevidos: algunos quisieron probar el transporte público de la ciudad para llegar a sitios más alejados. Las horas para estar en A Coruña eran limitadas y trataban de aprovecharlas al máximo.
Sin embargo, hubo quien prefirió caminar por la calle Real y echar un ojo por las tiendas. Sin duda, una de las que que triunfó entre los turistas fue Tiger, un local en el que no paraba de entrar gente a comprar. Es lo que le ocurrió a Valery, que caminaba con su marido John y decidieron entrar en este comercio. No es el primer crucero que hace esta pareja, que aseguró que su plan era «disfrutar de la ciudad y aprovechar el buen tiempo».
Procedentes de países del norte de Europa como Suiza, Alemania o Inglaterra, caminaban por las calles de A Coruña admirando todos sus detalles. Como no podía ser de otra manera, no faltaron las cámaras de fotos, que trataban de captar todo lo que aparecía ante sus ojos.
También se formaron grupos para diferentes actividades, como una visita guiada por la ciudad, que, evidentemente, tuvo parada obligatoria en la plaza de María Pita. Otros buscaron algo más original. Alquilaron patinetes eléctricos y un guía que les llevase por todos los rincones de la ciudad. No faltó tampoco la parada en las tiendas de suvenires para comprar postales.