Los presupuestos del tramo final del mandato en A Coruña

David García A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

ANGEL MANSO

El pleno aprobó inicialmente las cuentas más altas de la historia, de 310 millones de euros. Con las elecciones a la vista, es difícil que haya un nuevo acuerdo para el próximo año

13 mar 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

La corporación municipal de A Coruña aprobó de manera inicial el jueves los presupuestos de este año, que alcanzan los 310 millones de euros y son los más altos en la historia de la ciudad. Su crecimiento con respecto a los del 2020 es notable —hace dos años fueron de 260 millones— y su tardía aprobación junto con las elecciones municipales de mayo del 2023 implican que con alta probabilidad serán los últimos que reciban el visto bueno durante este mandato, que se encamina hacia su recta final.

¿Ya están aprobados los presupuestos?

El jueves tuvo lugar una sesión extraordinaria y urgente del pleno que fue convocada el martes después de que el Ayuntamiento celebrase en ese mismo día, y avisando a la oposición con pocos minutos de margen, una junta de gobierno y una comisión de Hacienda que permitiesen establecer la fecha del pleno de los presupuestos, que coincidió en el mismo día con el ordinario de este mes. La oposición fue muy crítica con la gestión de los tiempos realizada por el gobierno local. Las cuentas se aprobaron de manera inicial con los votos a favor del Partido Socialista (8, faltaban dos ediles) y Marea (5), y con el BNG y la concejala no adscrita de Podemos optando por la abstención. El Partido Popular fue el único que votó en contra. Ahora se abre un período de exposición pública en el que partidos políticos, asociaciones o particulares pueden presentar alegaciones al documento. Si las hay, tendrán que ser resueltas por los servicios económicos municipales y después tendrán que regresar al salón de plenos para su aprobación definitiva, que se estima para abril.

¿Por qué no se llevaron hasta ahora al salón de plenos?

El Partido Socialista y la Marea Atlántica comenzaron las negociaciones el pasado mes de septiembre y no alcanzaron un pacto hasta finales de febrero, cuando la alcaldesa, Inés Rey, y la portavoz de la Marea Atlántica, María García, presentaron el «acuerdo político» en el que se dieron a conocer algunas de las principales cuestiones de las cuentas. A diferencia de lo que sucedió hace dos años, en esta ocasión el gobierno local no llamó a las negociaciones al otro partido que permitió la investidura de la regidora y que contribuyó activamente a la elaboración de los presupuestos, el BNG, que ahora lamentó que no se respetase el pacto de investidura ni se contestase a las propuestas económicas que plantearon. Esto también lo hizo el PP, con el mismo resultado. Ambas formaciones fueron convocadas a una reunión tras la presentación del acuerdo político, pero lo rechazaron por considerar que era un «paripé».

¿A qué se debe el crecimiento del 19 %?

Los presupuestos alcanzan los 310 millones de euros, 50 más que los del 2020, y superan al de Vigo en casi 25 millones (285,6 millones). Además de la tendencia al alza de los últimos años en las cuentas municipales, en este ejercicio se incluyen los fondos europeos Next Generation que consiguió el Ayuntamiento —11 millones de euros—, y del IDAE —12 millones—, lo que conlleva un aumento de las inversiones de 24,3 a 59,2 millones. También destaca que el Ayuntamiento se endeudará en 24,6 millones de euros, entre los que se incluye un crédito, de manera que el débito municipal se prevé que crezca hasta los 70 millones, una cantidad todavía dentro de los márgenes permitidos. 

¿Cuáles son las inversiones más destacadas?

La fase final de la urbanización de Xuxán, el antiguo parque Ofimático, es la actuación que se llevará un mayor presupuesto superando los 9 millones de euros para dar continuidad a los trabajos iniciados hace dos meses. En este barrio también estará la tercera mayor inversión, con 2,7 millones de euros, para la construcción de un edificio de viviendas públicas. Mientras, el segundo puesto es para la renovación del alumbrado de la ciudad —7,7 millones—, una actuación que contará con parte de financiación del IDAE, dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica. El mercado de Monte Alto, la reurbanización de San Andrés, el edificio con viviendas públicas de Pontejos, la renovación de la Casa de Veeduría, la humanización del paseo marítimo en As Ánimas, mejoras en BiciCoruña o una rotonda entre la avenida del Ejército y Ramón Cajal son otras actuaciones destacadas. En las cuentas también figuran partidas para el inicio de las obras en la intermodal y un convenio para el Novo Chuac, pero no aparecen los muelles interiores por negativa de la Marea, con el beneplácito del gobierno local. 

¿Cómo afectan al ciudadano?

Las inversiones no son las únicas que crecen en los presupuestos, ya que también lo hacen el resto de gastos y los ingresos. La previsión es que este año se bata el récord por recaudación del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI), el tributo que más fondos aporta a las arcas municipales, que se cifra en 63 millones de euros. El año pasado rondó los 61. Por su parte, se calcula que los ingresos por la plusvalía caerán un 25 % hasta los 6,5 millones (igual que en el 2021). El Impuesto de Actividades Económicas se estima que aumentará de 10,7 millones del año pasado a 12, pero el interventor municipal cree que es un cálculo «sobrevalorado». También se prevé mayor recaudación por el Impuesto de Construcciones, Instalaciones y Obras hasta 5,4 millones. Las que también aumentarán serán las multas de tráfico con una previsión inicial de alcanzar los 8 millones de euros. 

¿Por qué es probable que no haya unas nuevas cuentas en el 2023?

El Partido Socialista gobierna en minoría con nueve concejales más la ex de Ciudadanos, Mónica Martínez. Esto supone que necesite más votos en el pleno, como los de la Marea este año. Contando con que entren en vigor en abril, el Ayuntamiento tendrá menos de nueve meses para su ejecución, un período que se antoja exiguo, por lo que su prórroga se presenta como más que probable para continuar con ellas hasta el final del mandato. La cita electoral de mayo del 2023 también provocará que en caso de sentarse a negociar las formaciones tengan más dificultades para llegar a un acuerdo, ya que las estrategias políticas jugarán un papel muy importante. Además, la relación entre el Partido Socialista y la Marea, su principal socio de gobierno por aportarle los votos necesarios para tener mayorías, está caracterizada por los altibajos. 

¿Cuál es el escenario actual en María Pita?

El PSOE sacará adelante sus segundos presupuestos de este mandato (el año pasado se prorrogaron los del 2020) con el apoyo de la Marea, pero la exclusión de las negociaciones del BNG y la tramitación urgente esta semana de las cuentas dejó tocada la relación con su otro socio de investidura, el Bloque, algo que quedó en evidencia en los plenos del jueves. Mientras, el gobierno local mantiene apartado de las principales cuestiones municipales al partido mayoritario en la oposición, el PP, que sin embargo fue clave para aprobar asuntos como la intermodal o el Novo Chuac en el salón de plenos. 

¿Y en el gobierno local?

El gobierno local atraviesa uno de los momentos más complicados del mandato por la acumulación de diversos acontecimientos en pocas semanas. Además de las críticas por el retraso en la aprobación de las cuentas por parte de la oposición, el conflicto con la recogida de basura que dejó notables actos vandálicos y sabotajes durante varios días y las calles de la ciudad repletas de residuos afectaron al equipo de gobierno. Inés Rey declaró la emergencia sanitaria para poder gestionar un contrato extraordinario con el que mejorar la situación en las calles, pero se mantiene abierta la convocatoria de huelga de los servicios de recogida de basura y limpieza por cuestiones laborales cuando la emergencia decaiga. Cuando esto parecía suavizarse, el exconcejal de Urbanismo y Movilidad, Juan Díaz Villoslada, comunicó su dimisión al sentir «falta de confianza» en proyectos clave para la ciudad y por su distanciamiento con el núcleo duro del gobierno local, formado por la alcaldesa, el portavoz municipal, el jefe de gabinete y varios concejales y asesores. El exedil fue reconocido por la oposición y otras Administraciones —incluido el presidente Feijoo— como una de las personas de mayor experiencia y talante negociador del gobierno local. 

¿Cómo afronta la alcaldesa los últimos 14 meses del mandato?

Inés Rey se mostró firme declarando el estado de emergencia para aliviar el problema de la basura y evitó pronunciarse con detalle sobre la salida de Villoslada, a quien agradeció su papel durante estos casi tres años. Los principales problemas desde el inicio del mandato para la regidora han estado a nivel interno. Suma tres modificaciones de la estructura del gobierno local entre transferencias de competencias, la adhesión de Mónica Martínez y la renuncia de Villoslada, además de la retirada de poderes a Eva Martínez Acón, que hasta hace una semana lideraba la agrupación socialista coruñesa, con la que las diferencias eran una realidad. El domingo, Inés Rey se impuso a Acón para hacerse con el poder del Partido Socialista coruñés y completar su ascenso de los últimos meses a todos los niveles orgánicos del partido, incluido el federal, respaldando a Valentín González Formoso.

ANGEL MANSO

El Novo Chuac, Santa Lucía y la intermodal se asoman, pero los muelles se diluyen

El Ayuntamiento no incluyó una partida para la reordenación de la fachada marítima pese a que propuso comprar el 75 % y ahora el plan está en punto muerto

D. García

Uno de los aspectos más destacados de los presupuestos de este año no aparece reflejado: los muelles interiores. El Ayuntamiento propuso hacerse con el 75 %, pero la Marea lo marcó como una línea roja y son los grandes ausentes de las cuentas. Sí lo están otros como la estación intermodal, el Novo Chuac o el centro de salud de Santa Lucía, aunque en diferentes medidas

El Puerto

La gran ausencia. El Ayuntamiento propuso en julio del año pasado la adquisición del 75 % de los muelles de Batería y Calvo Sotelo con la Xunta y el Puerto comprando el porcentaje restante, para lo que incluyeron fondos en sus respectivos presupuestos, al contrario de lo que pasó con el gobierno local. La Marea, como explicó su portavoz, señaló que era una línea roja que no aceptaría bajo ninguna premisa y desde el PSOE no se ofrecieron detalles de cómo cumpliría con su planteamiento. Una opción es recurrir a un modificativo de crédito —un cambio en las cuentas—, para lo que necesitaría al PP por su situación de minoría en el pleno. Esta misma semana, el presidente de Puertos del Estado solicitó concreción al Ayuntamiento sobre sus planes, lo mismo que la Xunta y la Autoridad Portuaria. El presidente del Puerto, Martín Fernández Prado, recordó que los tiempos no son muy amplios ya que en primavera deben negociar su plan de empresa, por lo que necesitan conocer a corto plazo la postura desde María Pita, que planteaba realizar el pago de alrededor de 15 millones hasta el 2035. Las negociaciones cayeron en punto muerto el pasado verano cuando el Ayuntamiento pidió a la Xunta que aumentase su financiación de la reurbanización de la zona, con el Gobierno gallego defendiendo una proporcionalidad con la titularidad de los terrenos. 

El nuevo hospital

50.000 euros. El documento de inversiones refleja una partida de 50.000 euros para el convenio con la Xunta para las obras del Novo Chuac. Sin más detalles, estos fondos deberían de ser para la adquisición de terrenos y podrían ser aumentadas más adelante. El acuerdo con el Gobierno gallego preveía la inclusión de esta partida, mientras que para el 2023 ya deberán figurar fondos también para la ejecución de los viales. Con las obras de la fase 0 en marcha, el grueso del proyecto se prevé para los próximos años y las Administraciones tienen cuestiones por cerrar, como el número de propiedades afectadas por las expropiaciones, para el que se debe firmar un convenio de gestión específico. 

Intercambiador

Licitaciones a punto de fructificar. La presidenta del ADIF aseguró el viernes durante la presentación del tren a Langosteira que en este semestre se licitará la parte ferroviaria de la estación intermodal. Antes deberían salir a concurso los elementos comunes, que incluyen una pasarela peatonal y para bicicletas, un vial inferior para vehículos y otras cuestiones complementarias. Mientras, la Xunta está esperando desde hace semanas para licitar su parte, relativa a la terminal de autobuses y el aparcamiento subterráneo, este último con financiación municipal. El Gobierno gallego quería tener ya licitadas estas cuestiones para no arriesgarse a una pérdida de fondos europeos o a un nuevo retraso en el proyecto, ya que si las obras no están en marcha en noviembre habrá que volver a redactarlo, pero asegura que necesita que el gobierno local certifique que sus cuentas incluyen el crédito suficiente para acreditar su aportación económica. 

Nuevo pulmón

100.000 euros. Los vecinos de A Falperra llevan ocho años aguardando por un nuevo centro de salud y mercado que adapten los actuales a las necesidades del propio barrio, pero la espera tendrá que continuar. El Ayuntamiento incluyó 100.000 euros para la reforma de la plaza de abastos y la Xunta un millón. Los técnicos de ambas Administraciones todavía están en la fase de estudio de borradores, por lo que la licitación y ejecución de las obras se antojan lejanas mientras el vetusto centro de salud de Federico Tapia permanece incapaz de dar respuesta a las necesidades de un barrio con una población envejecida. Los vecinos ven cómo esta obra no termina de arrancar y eso que, además de las mejoras que producirá en el ámbito sanitario y con el mercado, servirá como catalizador para la regeneración general de la zona.