Familiares y personas vinculadas a Martín Ferreiro Álvarez, que fue concejal de Obras Públicas del Ayuntamiento de A Coruña en la Segunda República y acabó muriendo en un campo de concentración nazi, le recordaron en el aniversario de su fallecimiento
24 nov 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Hace 80 años pasaban cosas que nos parecen imposibles. Por ejemplo, Martín Ferreiro Álvarez, que fue concejal de Obras Públicas en los tiempos de la Segunda República, murió en el campo de concentración nazi de Gusen tras ser deportado por sus ideas políticas. El actual gobierno municipal y la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica organizaron un homenaje para recordar a este hombre que defendió hasta sus últimas consecuencias la libertad y el progreso. Juan Díaz Villoslada, que ocupa el mismo cargo que desempañaba Martín Ferreiro; Jesús Celemín, concejal de Educación y Memoria Histórica; Carmen García-Rodeja, en representación de la citada asociación; el poeta Xulio Valcárcel; el investigador José Manuel López Tuñas, y el arquitecto Xosé Lois Martínez, fueron algunos de los asistentes. También Ángel Vázquez Bregua, sobrino de un deportado que fue compañero de Ferreiro, y José Luis Alamán, nieto del homenajeado, que puso fin al acto con un emocionado discurso.
Martín Ferreiro Álvarez, que nació en 1892 en Cerdedo (Pontevedra), estaba considerado en los años veinte como uno de los grandes maestros de obras de la ciudad. «Tan estimado por los propietarios como por los arquitectos, y también por los obreros que trabajan a sus órdenes», decía de él La Voz de Galicia en 1927, llegó A Coruña desde su Pontevedra natal cuando apenas tenía 12 años. En la ciudad se encargó, cuentan las crónicas de los años, de la edificación «de la magnífica barriada de casas baratas emplazada en el Campo Volante [en la actualidad Campo de Marte]. Hizo cuanto de su parte estuvo para que las obras no se interrumpieran cuando solo había para impulsarlas la garantía del propio peculio». Construyó allí 24 viviendas y en 1927 estaba levantando 12 más. Se encargó también de impulsar el actual parque de Santa Margarita (antes denominado de Joaquín Costa), de los edificios para la Comandancia de Ingenieros, varios chalés en A Pasaxe, diseñados por los arquitectos Mariño y Bescansa, así como numerosas obras en la calle de la Torre.
Socio del Casino Republicano desde 1931, Martín Ferreiro comenzó ese año su trayectoria política en el Partido Republicano Radical-Socialista, siendo elegido concejal en las elecciones del 12 de abril que dieron paso a la Segunda República.
Tras el golpe de Estado de 1936, huyó de A Coruña y, después de esconderse un tiempo en su villa natal, pasó a Portugal y desde allí a Francia. Regresó temporalmente a la zona republicana hasta la caída de Cataluña, integrándose en las Compañías de Trabajadores Extranjeros (CTE) que tomaron parte de la defensa de Francia durante la Segunda Guerra Mundial. Capturado por los nazis, y tras no ser reconocido como ciudadano español por el gobierno de Franco, fue deportado al campo de concentración de Mauthausen en diciembre de 1940. Un mes más tarde, en enero de 1941, fue trasladado al subcampo de Gusen, donde falleció el 23 de noviembre de 1941, víctima de las extremas condiciones de vida a las que allí fue sometido.