Una casa con parra en un barrio humilde de A Coruña y una carpa al revés, finalistas del COAG
A CORUÑA CIUDAD
Dos obras coruñesas aspiran a un galardón en la novena edición de los premios
11 sep 2021 . Actualizado a las 21:19 h.Reconocer la mejor arquitectura y también el arrojo de aquellos promotores que se atreven a innovar confiando en la visión de un especialista. Estas son dos de las motivaciones del Colegio de Arquitectos de Galicia (COAG), que esta semana hizo pública la lista de los finalistas en la novena edición de los Premios COAG.
Se presentaron 197 propuestas visadas, ejecutadas y finalizadas entre el 1 de agosto del 2018 y el 30 de septiembre del 2020. Tras una criba, el jurado seleccionó 38 obras entre las diferentes categorías y entre ellas hay dos proyectos desarrollados en la ciudad de A Coruña.
Son una vivienda unifamiliar en la Colonia de Casas Baratas Juan Canalejo, en Os Mallos, en la categoría de residencial de nueva planta, y la instalación colocada en el 2019 en la plaza de Tabacos, Tribuna Pública, dentro del grupo de arquitecturas efímeras.
Un hogar verde
El arquitecto con estudio en la calle Orillamar Óscar Pedrós es el responsable de una de las seis viviendas unifamiliares finalistas. Se trata de una casa en Os Mallos, en una de las colonias de las llamadas casas baratas. Hoy uno de los contados reductos de hogares con jardín en el centro urbano.
Los actuales propietarios del domicilio de la calle Ézaro decidieron reformar añadiendo una altura, tal y como permite el plan urbanístico de A Coruña. «La condición del proyecto fue mantener la fachada original de la primera planta, con su característico arco, conjugándola con el reto de aumentar un piso. Se articuló una escalera que antes no había y que adquiere protagonismo.
En el exterior, la planta que se añade se configura de una forma abstracta, para poner en valor la concreción del primer piso, con el arco y el nuevo dintel. Una lectura de la vivienda en la que se pueden ver las capas del tiempo», explica Pedrós. Todo esto en una manzana donde «no existe ni una sola vivienda reedificada que mantenga la composición inicial», destaca.
Hay otro aspecto diferencial. «La fachada está orientada al sur. En la planta superior utilizamos un acristalamiento traslúcido para proteger la intimidad del hogar y que permite filtrar la luz. Además, se remató con una parra virgen, un elemento vegetal de hoja caduca. Así, en verano la parra con la hoja crecida regula la radiación y, en invierno, la hoja cae y la casa se calienta en la zona de los dormitorios de forma eficiente, sin consumo energético de noche», detalla. Compite con viviendas de Nigrán, Cangas, Rois, Carballo y Porto do Son.
Pabellón temporal
La otra propuesta coruñesa finalista es el pabellón temporal que se ubicó en la plaza de Tabacos en el 2019, la Tribuna Pública. «Es una intervención bastante inusual y atrevida. Le dimos la vuelta a la idea de carpa que hay estipulada. Llevamos la estructura fuera, los andamios, y la carpa quedó por dentro. Jugamos con la iluminación y el color del textil exterior para que fuese un reclamo en la plaza», indica Juan Miguel Salgado, arquitecto junto a Alba González y Manuel Santalla de la intervención que tuvo como colaborador a Juan de Nieves y cuyo promotor fue la Fundación Luis Seoane.
Espacios urbanos, rehabilitación y divulgación, otras categorías con nominados coruñeses
Los fallos del Colegio de Arquitectos de Galicia (COAG) se conocerán el próximo 25 de septiembre y entre los valores que destaca uno de los finalistas, Óscar Pedrós, más allá del calidad técnica de los proyectos, «está la valentía de los promotores», en especial, dice, cuando se habla de familias que arriesgan por salirse de lo convencional. Él es uno de los arquitectos que aspiran a hacerse con uno de los premios, pero, aunque en esta edición solo se han colado hasta la ronda final dos obras desarrolladas en la ciudad, hay más coruñeses que podrían obtener premio.
Entre ellos, destaca por la transformación que supuso su diseño en un centro urbano Carlos Pita Abad. El profesor de la Escola de Arquitectura de la UDC concurre en la categoría de diseño de espacios urbanos por su celebrada rehabilitación de la plaza de Armas de Ferrol. Pita, que también fue el director de obra, compite con la red de miradores y observatorios del geodestino Condado de Paradanta y con la urbanización del entorno del peto de ánimas de Piñeiro, en la localidad de Gondomar.
A su favor tiene una baza, la plaza de Armas ya ganó este año el premio FAD de Arquitectura e Interiorismo, en el apartado de Ciudad y Paisaje, que se falló hace unos meses en Barcelona.
Con estudio en A Coruña, Covadonga Carrasco y Juan Creus concurren en el área de edificios de nueva planta por el centro social de Cornido, en Carnota. En el apartado de rehabilitación, Óscar Fuertes, de la delegación coruñesa del COAG, podría ser uno de los ganadores por su rehabilitación de una vivienda unifamiliar en el barrio de Miraflores, en Muros, que hizo con el vigués Iago Fernández.
En la categoría de obras de divulgación repite Óscar Pedrós en liza con otro coruñés, Andrés Patiño. Por último, hay tres proyectos fin de carrera ideados para construirse, dos A Coruña y uno en Oleiros, con opciones para llevarse un premio.
Aspirantes a ser realidad
Otras tres propuestas ideadas para construirse en la ciudad de A Coruña sobresalen en la categoría de proyectos de fin de carrera, con cinco nominados. Se trata de una vivienda cohousing para que cohabiten personas mayores en San Pedro de Nós (Oleiros), de Roi Zas; de un centro de acogida para personas víctimas de violencia de género en el barrio de Santa Lucía, de Borja Fernández, y de unos juzgados en el baluarte por Rafael Juanatey.