La mujer, de 65 años, contrató una empresa que, según su letrado, demostró con el ADN ser fruto de una relación oculta. Un juzgado resolverá el caso con nuevas pruebas
07 sep 2021 . Actualizado a las 17:22 h.Los juzgados coruñeses acogeran a final de año un juicio por reclamacion filial auspiciado por una malagueña de 65 años que dice tener pruebas «irrefutables» de ser la hija de un juez coruñés ya fallecido y que en la década de los 50 ejerció en la ciudad andaluza.
Según aparece en la demanda, la madre de esta mujer conoció al magistrado cuando tenía 17 años y trabajaba como sirvienta en otro domicilio. «Ambos inician una relación sentimental reservada, pues el juez mantenía ya una relación pública y formal con otra mujer», según el despacho Osuna, que asegura que el hombre dejó embarazada a la mujer y nació una hija que no fue reconocida. Añade que «la relación entre ambos se fue apagando poco a poco por la distancia existente entre la nueva localidad del juez por razones laborales (A Coruña) y la malagueña. En un momento determinado el juez decide abandonar tanto a la hija, como a la madre».
En la actualidad, ambos progenitores han fallecido. La hija demandante ha intentado contactar con los hijos matrimoniales del juez para explicarles la situación y tratar de realizarse la prueba de hermandad de común acuerdo y en función de su resultado regularizar la situación, obteniendo el silencio como respuesta.
Ante la imposibilidad de contactar con sus presuntos hermanos biológicos, la hija se vio obligada a contratar los servicios de una agencia privada de investigación, a fin de conseguir una muestra de ADN y poder confirmar la paternidad biológica del juez.
Los investigadores recogieron en A Coruña muestras de ADN de un hijo del juez, supuestamente hermano biológico de la hija demandante, dando un resultado del 99 % de hermanidad.
Se presentó la correspondiente demanda, el juzgado la admitió a trámite y el Juzgado ha citado al hermano biológico de la demandante, no reconocida como hija, para practicar nuevamente la prueba de ADN en presencia judicial.