Frente común de los polígonos en el ámbito de A Coruña para acabar con el feísmo en sus parcelas

Elena Silveira
Elena Silveira A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

VÍTOR MEJUTO

La mayoría ya aplican medidas para hacer estos esos espacios más humanizados

01 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

La mayor parte de los polígonos industriales de A Coruña y su área metropolitana surgieron a mitad del pasado siglo como una forma de concentrar la actividad empresarial y dejar libre los centros urbanos. Sin embargo, muchos fueron creciendo a golpe de improvisación, con escasos espacios para zonas verdes, viales disfuncionales o sin conexión con las grandes vías de comunicación y con escasos servicios para las miles de personas que, a diario, se desplazan a ellos. Por ello, la Xunta inició el desarrollo de un protocolo de actuación que permita clasificar los polígonos según sus características y programar unas medida que luche contra el feísmo y apueste por la integración paisajística en estos espacios. Teresa Firvida, gerente de la Asociación de Empresarios de Agrela, explica que la Consellería de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda ya avanzó este plan contra el feísmo durante unas jornadas a la que asistieron responsables de parques industriales y empresariales de toda Galicia. «Nosotros entendemos que esta medida no afecta directamente a los polígonos ya consolidados, como es el de A Grela, con naves y construcciones ya hechas. Sí sería de aplicación, en todo caso, en el supuesto de que se levanten nuevas naves o edificios o se produzca alguna reforma». Añade que la asociación ha hecho un esfuerzo importante para coordinarse con el Ayuntamiento de A Coruña a la hora de mejorar las infraestructuras ya existentes, especialmente en adecentar aceras, asfaltado de calle e lograr una mayor armonía entre las obras en vía pública y las iniciativas privadas. «Muchas empresas que han abierto o han hecho mejoras tienen sus fachadas mucho más cuidadas y acondicionadas, han construido escaparates con el objetivo de visibilizar sus negocios y apostar por una estética más agradable. Ya no se hacen naves industriales cerradas por muros». Explica que en los últimos años se han cambiado rotulaciones, pintado estructuras y mejorado la estética de los negocios. «Todavía queda mucho por avanzar, pero es importante que exista una coordinación entre Administraciones y entidades privadas para lograr polígonos más humanizados», indica Firvida.

Ricardo Tormo, presidente de la Asociación de Empresarios de Pocomaco, asegura que está de acuerdo con la iniciativa de la Xunta para también poner coto al feísmo en las zonas industriales. «Intentamos que todas nuestras actuaciones se enfoquen al mantenimiento estético del polígono y sus zonas verdes, ya que somos los dueños de todo este espacio. No es algo habitual, ya que lo normal es que los polígonos sean recepcionados por los ayuntamientos y estos se encarguen de su mantenimiento. Así que nuestro caso es un capítulo a parte», indica. Y explica que desde Pocomaco solo pueden opinar y «ofrecer nuestra máxima colaboración para avanzar en ese sentido». Indica que no pueden intervenir en la estética de las naves ya que ello depende de las ordenanzas y autorizaciones municipales. «Pero sí recomendamos que se mantengan en las mejores condiciones posibles. De hecho, considero que hay naves que no se merecen estar ahí desde el punto de vista estético. Hay que intentar hacer cosas que no ofendan a la vista y al paisaje y se integren en el entorno. Es de sentido común mejorar las cosas que tenemos», añadió.

El alcalde de Culleredo, José Ramón Rioboo, explica que siempre que se abre el proceso de redacción de una nueva legislación «hay que esperar a conocer de primera mano el contenido dela misma». «Sin ir más lejos, el polígono de Alvedro ya cuenta con zonas ajardinadas, lo que supone un paso adelante muy importante contra el feísmo que quiere eliminar la Xunta». El regidor añade que, a priori, «se antojaría muy difícil hacerlos en las superficies ya edificadas, y es por ello que creemos necesario tener conocimiento pleno de la información para hacer un análisis más exhaustivo», comenta.

Desde la Comunidad de Propietarios del Polígono de Bergondo indican que la nueva norma no afectará de lleno a los espacios ya consolidados, sino a los que están en construcción. En todo caso, indican que «estamos haciendo mucho para evitar el feísmo y ordenando aparcamientos, «que es un grave problema». «Intentamos crear un espacio amable para las empresas y los trabajadores. Creemos que nos adaptamos a lo que fijan las normas, pero cualquier avance al respecto siempre es positivo». Indicaron, además, que los responsables de los polígonos industriales del área coruñesa están pendientes de una reunión con técnicos de la Xunta para crear una mesa de estudio en la que abordar y analizar las mejores y más eficaces medidas contra el feísmo en los polígonos. 

Desde el Concello de Bergondo indican que todavía no conocen en profundidad el detalle de la iniciativa: «Cremos que sería máis fácil de aplicar en polígonos de nova creación ou que non estean completos, como é o caso de Bergondo. Se fixésemos un polígono cero seguramente contaría con máis zonas verdes, o peón gañaría espazo e poderiamos contar cun regulamento centrado na estética que terían que ter todas as naves. Agora, con case todas as parcelas ocupadas, sería complicado»,añaden desde el gobierno local.

Sabón, a la espera de unas nuevas normas subsidiarias mas respetuosas con el entorno

La gerente del polígono de Sabón, Marta Marzoa, indica que el protocolo de la Xunta para acabar con el feísmo en las zonas industriales es «una buena iniciativa, porque lógicamente lo que contribuya a que estos espacios sean más amables, es bueno tanto para la imagen de las empresas como para la convivencia con los núcleos urbanos. De hecho, en muchos casos, como es el del polígono de Arteixo, están pegados a las zonas residenciales.

Marzoa explica que en la asociación de empresarios llevan trabajando en esta línea desde hace años. «Esperamos que en breve se aprueben las nuevas normas subsidiarias que afectan al polígono de Sabón y que incluyen cláusulas de este tipo». En concreto, la normativa hará referencia a aspectos que permitan que haya una mejor integración de las industrias en los lindes con las zonas más sensibles de paisaje o con el casco urbano,. «En todas las obras que hacemos (ahora se están duplicando los carriles de la avenida de la Diputación) contamos con el asesoramiento de Medio Ambiente y de grupos ecologistas». Explica que en la zona del embalse de O Rosadoiro, todos los trabajos «se hacen de forma adecuada y, de hecho, por cada árbol cortado se planta otro en el mismo sitio. Es una zona natural de enorme variedad de fauna y flora, y todos los asociados están orgullosos de poder preservarla», destaca. Adelanta que la nueva normativa establecerá que en los límites con la costa y el casco urbano no se van a poder hacer naves-muro o naves-pantallas, teniendo que ser más permeables con el entorno. También la industria más pesada deberá estar concentrada en ámbitos concretos.