El juez toma declaración a 20 testigos más por la muerte de Samuel

Alberto Mahía A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

CESAR QUIAN

La agresión que sufrió uno de los jóvenes senegaleses será juzgada aparte. Lo que aún queda para cerrar la investigación del crimen

19 ago 2021 . Actualizado a las 18:36 h.

El Juzgado de Instrucción número 8 de A Coruña continúa con las diligencias de investigación para tratar esclarecer la forma en la que se produjo el crimen de Samuel Luiz, sucedido en la madrugada del sábado 3 de julio en el paseo marítimo de A Coruña.

Esta semana, el juez que dirige en estos momentos la causa ha tomado declaración a 20 testigos, personas que se encontraban en las inmediaciones del lugar de los hechos, la mayor parte de ellas del entorno de los presuntos agresores, aunque también de la víctima o que se encontraban en el interior del pub donde previamente habían coincidido los sospechosos y el fallecido.

Entre los que fueron llamados ante el juez figuraban además personas que se encontraban en la zona y pudieron ver la agresión o parte de ella. Se les mostraron fotografías de los sospechosos por si alguno de ellos los identificaba. Ya lo habían hecho con anterioridad en dependencias judiciales. Algunos se habían presentado voluntariamente para colaborar en el esclarecimiento de los hechos.

Han declarado también en calidad de testigos las dos personas que auxiliaron a Samuel Luiz. La agresión que sufrió una de estas personas cuando trataba de proteger a la víctima dará lugar a una causa separada que se abordará en otro procedimiento, tal como se acordó en un auto del 3 de agosto. 

Ibrahima declaró en su día que se encontraba en la zona cuando, acompañado de su amigo Magatte, vio que un grupo —no pudo contar cuántos eran— le propinaba patadas y puñetazos a un chico. Así que decidieron intervenir. Mientras este levantó a Samuel del suelo, su compañero se puso entre él y los agresores para frenar la pelea. Pero «los chicos nos rodearon y no pudimos pararlos», apuntó. Declaró que incluso cuando la víctima corría ayudada por ellos, aquellos continuaban pegándole.

Estuvieron junto a Samuel hasta que dejaron de agredirlo. «Lo pusimos de lado y nos fuimos», dijo. También destacó que no vieron ni navajas ni objetos contundentes, que solo le propinaban golpes por todo el cuerpo con manos y pies.

Aunque no le preguntaron por los golpes que sufrió por parte de uno de los agresores, por la declaración de un testigo se sabe que a Ibrahima le dieron dos puñetazos en el rostro.

Por su parte, su amigo Magatte, al que también otorgaron la residencia por su acto heroico, declaró lo mismo. Pero este sí pudo reconocer por fotografías a tres de los supuestos agresores. En cuanto al número de personas que vio pegar a Samuel, calculó que «serían unos siete».

El juzgado está ahora a la espera de recibir informes de carácter policial.