Guía para disfrutar de la ruta más dulce y fresca del verano en A Coruña

Laura Casal Fernández / C.A

A CORUÑA CIUDAD

EDUARDO PEREZ

Visitamos cinco heladerías coruñesas que nunca fallan cuando llega el calor; además de preservar una larga tradición, han encontrado su rasgo diferenciador en la especialización del producto

21 jul 2021 . Actualizado a las 21:01 h.

Los más devotos de los postres saben dónde se encuentra el culmen del arte de la cocina bajo cero en A Coruña, y es en los locales de la avenida de la Marina. El calor propio de los meses de verano devuelve esa pasión que se renueva cada año. Las cosas es mejor hacerlas con sabor y con saber, y así es como trabajan estos cinco establecimientos. Los clásicos que nunca fallan, en tarrina o cucurucho y los sabores de este verano.

Cada uno tiene su clientela, que no diferencia entre edades, y va traspasando generaciones. Desde los paseos que terminan en helado con una madre, hasta que años después se pasa el testigo a los hijos. A pesar de la lluvia y el invierno interminable en la ciudad algunos de ellos permanecen abiertos todo el año, pero aún así, su mejor época es el verano. Los locos de los helados pueden comenzar el control de calidad en los mejores y más tradicionales sitios. Ahora la oferta se ha multiplicado y el protagonista del verano está innovando más que nunca. La especialización es más que evidente. De la lista se cayó meses atrás por cierre otro clásico que muchos añoran, la Heladería Italiana, fundada en 1950.

Heladería Colón 

EDUARDO PEREZ

Empezamos la ruta en la no tan nueva heladería Colón, pues a pesar de haber mudado de piel, sigue estando entre las favoritas. Con una cola permanente durante el verano ofrecen 30 sabores distintos, aunque los más demandados son los de siempre, el chocolate, la vainilla y avellana. Les sigue de cerca el de yogur, que ya se convirtió en un clásico. El nuevo espacio que abrieron mantiene la esencia de una empresa que lleva en la ciudad más de 30 años. «Llevo toda la vida viniendo aquí», dice Sandra, una coruñesa que cuando llega esta época del año, no duda a dónde debe ir. Además tienen un servicio de cáterin para bodas y eventos. 

 Bico de Xeado

ANGEL MANSO

La heladería Bico de Xeado también está en la lista, pero ya no es una más. Son helados que se producen con la energía de 110 paneles solares. Desde Granxa o Cancelo se desarrollan todas las creaciones con ingredientes de proximidad. Es una apuesta sostenible de elaboración artesanal gallega. Una demostración de que lo diferente funciona. Con su sabor de arroz con leche han conquistado los corazones y los estómagos de todos los coruñeses. También recomiendan probar otros, como el de castaña, frambuesa o pimiento, que son estacionales.

 La Ibi

MARCOS MÍGUEZ

La Ibi es otro ejemplo de un negocio familiar histórico que lleva dos generaciones y perdura en el tiempo, aunque reinventándose desde 1962. Desde los carritos para vender por plazas y playas al actual local con cafetería que siempre está lleno. Con una amplia trayectoria ofrecen creaciones propias de helados recién mantecados, además de gofres o crepes que también son un bum. Aquí los clientes son fieles a los sabores clásicos, entre los que destaca el de crema de limón. 

 Puerta Real

PACO RODRÍGUEZ

La heladería de Puerta Real es un acierto seguro que elabora los helados con leche fresca gallega. No se han conformado solo con A Coruña, y han ampliado su negocio a otras ciudades como Santiago de Compostela. Con más de 150 sabores afirman que la gente es de costumbres y sigue consumiendo lo mismo. «Cheescake, frutos del bosque, vainilla o chocolate, no falla». Aún así sus productos son fruto de la mezcla entre recetas propias y de tradición italiana, y ofrecen otros sabores como el de tiramisú o crema de orujo, que confirman, también tienen bastante éxito. 

 Heladería Lonxa 

EDUARDO PEREZ

A partir de este verano una oferta más se suma a la lista, Lonxa, que abrió en la Marina hace poco y y ya tiene su club de fans. Se trata de una marca nacida en Ourense que promueve un producto natural y gallego, que no tiene conservantes ni azúcares añadidos. Aquí encontraremos una versión apta para celíacos, veganos y realfooders, con más de 20 sabores que irán cambiando según temporadas. El famoso chocolate negro 70%, vainilla de Madagascar y la crema de Camino de Santiago son varias de las opciones. Tarta de queso, chocolate o también pistacho siciliano con flor de sal son otras que supondrán un dilema para los clientes.