María Romero, diseñadora en Estados Unidos: «La moda necesita ser reformada desde la raíz, el consumidor»

Alejandro García Chouciño
A. g. chouciño A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

María Romero y su perro Coco en Hudson
María Romero y su perro Coco en Hudson cedida

Esta coruñesa ha creado su estudio propio en Hudson. Para cumplir su sueño también tuvo que vivir una temporada en México e Italia

19 may 2021 . Actualizado a las 10:37 h.

María Romero de Francisco (1985) lleva residiendo fuera de A Coruña media vida. Su meta desde joven era ser diseñadora de moda y vivir en Nueva York. Hace nueve años que lo logró, tras pasar antes por México e Italia. «Cuando empecé a estudiar me di cuenta que me gustaría saber más sobre los textiles antes de empezar a manipularlos y decidí irme a estudiar diseño textil a México, volver a mi otro hogar —sus padres habían emigrado a Ciudad de México— y aprender en un lugar que tiene una historia textil muy extensa. En el cuarto año me salió la oportunidad de hacer un intercambio en Milán por un año, podría enfocar lo que sabía sobre textiles y moda y me fui. Un año se convirtieron en dos y me titulé en Milán. Volví a México a terminar el último semestre, me gradué en diseño textil y acabando me volví a Milán a trabajar en Menswear», explica.

«Las puertas se han ido abriendo y yo las he aprovechado»

Todos estos cambios, sostiene, han enriquecido su formación y visión de la profesión: «Las puertas se han ido abriendo y yo las he aprovechado. Para mí, los cambios de país han sido un baño de humildad continuo, hay muchas cosas que no se hacen como las hacíamos en mi casa, o que no se piensan como las pienso yo». Finalmente, su objetivo se hacía realidad. «Tuve suerte, era mi destino venir y quedarme. Una empresa necesitaba una diseñadora de moda con experiencia en Menswear, ¡me necesitaban a mí y yo a ellos! Tres meses de trámites y finalmente en febrero del 2012 ya vivía en NYC».

«En verano lanzaré un nuevo desarrollo de mi proyecto y el estar aquí me ha facilitado el poder llevarlo a cabo»

Con su experiencia en el sector, decidió en el 2017 crear su propio estudio de diseño para intentar cambiar los hábitos de consumo. «El mundo de la moda en EEUU, España y el resto del mundo necesita ser reformado desde la raíz: el consumidor. Si cambia lo que la gente demanda, las marcas no tendrán otra opción más que adaptarse a estas nuevas demandas, producir lo que se va a vender, uso de fibras naturales y recicladas (naturales), demandar el bienestar físico y mental de todas las personas por las que pasa cada uno de los elementos que componen una prenda… y así poco a poco, pero lo más rápido posible, que el tiempo es oro», precisa María. Para ello, decidió alejarse un poco de la ciudad y se mudó a Hudson. «Necesitaba más espacio físico y mental. En verano lanzaré un nuevo desarrollo de mi proyecto y el estar aquí me ha facilitado el poder llevarlo a cabo, bajo a la ciudad a menudo a ver a mis amigos y a reunirme con las fábricas con las que trabajo y después vuelvo a casa en el tren que recorre el Hudson River. Es bello poder tener el balance de ambos», confiesa.