Sandra Dubra: «Mi profesión de farmacéutica es compatible con los bailes de Tik Tok»

Loreto Silvoso
Loreto silvoso A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

EDUARDO PEREZ

La boticaria de Puerta Real acumula vídeos con cien mil visualizaciones en su @farmatiks

16 may 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

«En cuestiones de salud, solo top influencers», proclama el Colegio de Farmacéuticos. Esa es la máxima de Sandra Dubra (A Coruña, 1988), la boticaria de Puerta Real, que triunfa en Tik Tok. Tanto te aclara dudas de vacunas a ritmo de Sebastian Yatra como te cuenta un día en su vida en 30 segundos. Hace un año se lanzó a la red de los vídeos cortos porque «es donde está el público más joven», explica.

-Había que salirles al encuentro.

-Sí, para que no caigan en bulos. Están muy expuestos a la desinformación.

-Diga un bulo que le duela ver.

-El mito del dióxido del cloro contra el covid. En Latinoamérica ha muerto gente intoxicada con el cloro de las piscinas por culpa de este tipo de bulos.

-¿Empezó en el confinamiento?

-Sí. En una sola mañana podía explicar lo mismo sobre mascarillas o geles a unas 30 personas. Con un vídeo en Tik Tok puedo llegar a 30.000. Calcule.

-¿Y no será que la Boticaria García andaba lejos y vio vía libre?

-Cada uno tiene su público. En Instagram ya hay gente que está muy fuerte, como ella.

-Si hay que bailar, ¿se baila?

-¡Pues claro! A veces bailo. Al final, soy una persona joven disfrutando de una red social. Mi profesión de farmacéutica es compatible con los bailes de Tik Tok.

-¿Le roba mucho tiempo?

-Imagínese... Si hago tres vídeos, pues unas cinco horas al día. Entre grabar, editar, posicionar y contestar preguntas...

-Y todo por amor al arte, claro.

-Claro. Mi objetivo no es ganar nada. Solo lo hago por divulgar.

-¿Funciona publicar mucho o hay que dosificarse?

-Tik Tok te premia si creas mucho contenido. Es lo que quieren: cantidad. Más que calidad.

-Publicaciones suyas virales:

-Cómo funciona el Omeprazol, los efectos adversos del Nolotil y la resistencia a antibióticos.

-¡«Tag» de la farmacia! Baje un dedo si hizo alguna de estas cosas [mejor conteste con palabras].

-Vamos allá. ¡Ja, ja...!

-Se sabe de memoria lo que toman sus pacientes habituales.

-Sí. Incluso los conocemos por su medicación. ¡Esta tarde va a venir el Señor del Crestor de 5g!

-¿Alguna vez hizo creer a un paciente que entendía la letra de la receta, pero se fue corriendo a buscar ayuda?

-Todos los días. ¡Ja, ja..! Hay veces que pides ayuda a los compañeros o lo intentas deducir.

-¿Le describen la pastilla?

-Sí, también. Un paciente me la dibujó tal cual la veía, pero solo ponía 600 en un círculo. «Dame esto». Resultó ser ibuprofeno.

-¿La agasajan con regalitos por su excelente atención?

-Sí, con bombones, por ejemplo. Me han llegado a traer un centollo preparado para comer, con las patas al lado, envuelto en film y las pinzas en las patas. ¡Ja, ja...!

-¿Le llevan análisis del laboratorio para interpretar?

-Cuando se quedan con dudas, nos piden que profundicemos en el tema, y se lo explicamos.

-¿Se ha olvidado alguna vez de encargar un medicamento y le echó la culpa al repartidor?

-Muchas veces.

-¿En el turno de noche, maldice al que va a comprar perfumería?

-Ahora en A Coruña no hay guardias, pero eso ocurre.

-¿Se siente un poco como la psicóloga del barrio?

-Muchísimo. Cuando un paciente lo está pasando mal, se desahoga con nosotros. Eso también es parte de nuestro trabajo.

«Mis padres tienen el bar Internacional en Rubine, pero no querían que yo fuese hostelera»

La farmacéutica tiktoker Sandra Dubra se crio entre los banderines futboleros del bar Internacional 2, en la avenida Rubine, que regentan sus padres.

-¿Se vio detrás de la barra?

-No, porque mis padres nunca quisieron que me dedicara a nada similar a la hostelería. Siempre me dijeron que estudiase, porque es un oficio muy esclavo.

-Se decantó por Farmacia. ¿Fue a curso por año?

-Sí, acabé la carrera con 23 añitos y pronto surgió la oportunidad de coger la farmacia de Puerta Real. Con el apoyo de mis padres, me lancé a la aventura y ha sido un no parar de aprender desde entonces.

-¿Cuándo vendió la primera tirita en su botica de Puerta Real?

-Hace 8 años. Mis padres hipotecaron toda su vida de trabajo para que yo tuviera la farmacia. Tenía 25 cuando empecé. Era la más joven y fue todo un reto.

-¿Cómo ha sido este año?

-El 90 % de la población pasó por una farmacia en el primer mes de la pandemia. Te expresan sus miedos y muchos te preguntan qué va a pasar.

-¿Se siente realizada?

-Mucho. Con esto del Tik Tok siento que puedo ayudar de una forma nueva. Como profesional, todo esto me hace sentir útil y me he enamorado mucho más de mi trabajo. Esa es mi motivación.

-¿Le ha hecho ganar clientela?

-Alguna vez ha venido alguien a preguntar por los temas de los vídeos, pero el grueso de los pacientes sigue siendo el mismo.

-Antes tenía los cruceros.

-Con la pandemia eso se acabó.

-¿Le venían mucho?

-Mucho, sí. Por mareos del barco, diarreas, quemaduras de sol... Las farmacias de los barcos suelen tener precios más elevados y por eso suelen aprovechar cuando llegan a un puerto.

«Extra bonus»: Un grupo de farmacéuticos españoles que desarrollan una labor educativa de la salud en las redes sociales acaban de ser galardonados con un Premio Cinfa a la Innovación en Farmacia Comunitaria. Elaboraron una candidatura conjunta y la coruñesa Sandra Dubra era la portavoz. Dice que se siente «útil» y «realizada» con ello.