La Marea, el BNG y la concejala no adscrita plantearon una moción conjunta que no salió adelante por una enmienda del gobierno local apoyada por el PP. Rey rechaza el plan de Feijoo para el puerto de A Coruña y la Xunta le insta a plantear su alternativa
06 may 2021 . Actualizado a las 14:38 h.La reunión entre Administraciones de este miércoles para tratar el futuro de los muelles interiores y la postura del gobierno local de A Coruña de rechazar la propuesta de la Xunta tuvo su continuación un día después después en el salón de plenos municipal. La Marea, el BNG y la concejala no adscrita Isabel Faraldo plantearon una moción conjunta que no prosperó ya que el PSOE introdujo una enmienda que ya había sido aprobada por unanimidad en diciembre y con el apoyo del PP en abril, misma situación que se repitió este jueves.
El concejal de Urbanismo, Juan Díaz Villoslada, siguió la línea expresada un día antes por la alcaldesa, Inés Rey, y llamó a «non caer en precipitación interesadas» y a «marcar o rumbo coa máxima responsabilidade». El edil defendió la compatibilidad de trabajar en una «planificación» a medio y largo plazo al mismo tiempo que se aborda la apertura de muelles como Batería o Calvo Sotelo.
La portavoz del PP, Rosa Gallego, lamentó que el gobierno local rechazase la propuesta de la Xunta, la «única con fondos y plazos concretos». La popular defendió la labor que está desempeñando el gobierno autonómico también para conseguir la financiación para el tren a Langosteira y lamentó que el Ayuntamiento vaya «en solitario».
Esta misma cuestión fue también apoyada por la Marea, la concejala no adscrita Isabel Faraldo y el BNG, que centraron buena parte de sus intervenciones en la «falta de transparencia» en las negociaciones sobre este asunto y que no se esté implicando a la ciudadanía en la transformación de esta parte de la fachada marítima.
Anteriormente se había aprobado con los votos del PSOE, BNG y la concejala no adscrita una suspensión de licencias en O Castrillón, mientras que la Marea se abstuvo y el PP votó en contra. Este fue el único asunto de la parte resolutiva del pleno, cuestión que provocó quejas de la oposición por la ausencia de puntos relevantes para su discusión. Además, al inicio se leyó una declaración institucional en defensa de los puestos de trabajo en la refinería de Repsol.