El impulsor de la anatomía patológica en el Chuac

EDUARDO VÁZQUEZ MARTUL A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Jerónimo Forteza Vila falleció a los 80 años en su tierra natal, Valencia

26 abr 2021 . Actualizado a las 21:54 h.

El escribir algunas líneas sobre un personaje que ha fallecido sin caer en alabanzas huecas (somos el país que mejor entierra a sus difuntos), o en olvido de hechos importantes que solo la intimidad es conocedora, no es fácil. Fácil sería si nos limitásemos a hacer un resumen de su currículum vitae, muy intenso y extenso sin duda, ya que cualquier buscador bibliográfico llenaría una gran obra que se empezó a plasmar en el Chuac allá por los lejanos años 70 en los que el doctor Jerónimo Forteza creó el servicio de Anatomía Patológica.

Y digo creó porque antes no había nada o, casi nada, para que nadie se ofenda. La anatomía patológica se limitaba a un laboratorio en donde «se teñían» tejidos o células para detectar algo anormal. Labor importante pero muy alejada de la medicina moderna que debe basarse en la evidencia.

Con su ímpetu, el trabajo y el conocimiento de su equipo, acercó la autopsia clínica al método diagnóstico, a la docencia y a la práctica diaria de un hospital formador de médicos. La demostración de las causas de la enfermedad ante los clínicos o cirujanos se convertiría en el ágora del hospital. Era la sesión clínica más importante, y por eso el Chuac siempre destacó en esta actividad sobre otros hospitales de su entorno.

Otro de sus puntos fuertes era su apuesta por líneas de investigación que pronto cogerían auge en la medicina moderna. Pero para eso había que dotar al servicio de personal muy preparado, romper la endogamia e invertir en tecnología moderna.

Siempre buscó con gran ahínco salir fuera, beber en otras fuentes del conocimiento. Impulsaba a quien quería formarse en los mejores hospitales nacionales o del extranjero, o traía a los más insignes profesionales mundiales. Construyó vías directas con los que poseían el conocimiento en un flujo directo y constante con las mas señaladas escuelas de medicina.

Sin duda puso la semilla para que otros profesionales continuaran su labor alcanzando el prestigio necesario para convertirse en un centro de referencia nacional. Pocos se han percatado de que si el Chuac es orgullo de la ciudad y de Galicia ha sido por el impulso inicial en los lejanos 70 de unos profesionales que trajeron savia nueva de otras latitudes, formados en excelentes escuelas fuera de Galicia, que modernizaron una medicina rompiendo una endogamia alejada de la innovación.

Pero para cambiar lo antiguo y creer en un futuro mejor se necesita valentía e inteligencia. Ambos atributos los tenía, los inició en el Chuac, los continuó en la Facultad de Medicina de Santiago, en la que fue catedrático de Anatomía Patológica en 1985, y emeritus hasta 2011, y los terminó en su tierra natal, Valencia, primero en la Universidad Católica y últimamente, siempre con mente lúcida, en la Unidad Mixta de Patología Molecular e Investigación del Instituto Valenciano de Investigación. DEP.

Eduardo Vázquez Martul es doctor en Medicina y exjefe del servicio de Anatomía Patológica del Chuac