Jorge Varandela: «El Clásico está siendo un viaje maravilloso»

María Doallo Freire
María Doallo OURENSE

A CORUÑA CIUDAD

Cedida

El actor ourensano estará en A Coruña con la obra «El príncipe constante»

15 abr 2021 . Actualizado a las 14:49 h.

El príncipe constante, el texto de Calderón de la Barca, lo ha adaptado al teatro Xavier Albertí. Lo ha hecho para la Compañía Nacional de Clásico que este viernes aterriza en el Rosalía de A Coruña con dos funciones de esta obra. La primera será el viernes y la segunda el sábado, ambas a las 19.30 horas. Entre el elenco, capitaneado por el reconocido Lluís Homar se encuentra el actor ourensano Jorge Varandela.

—Primero fue volver a los escenarios tras la pandemia y, ahora, toca hacerlo en casa...

—Sí, la verdad es que para mí es un lujo volver a Galicia, especialmente porque supone estar cerca de los míos. Me pasó cuando rodamos Néboa y solo tengo recuerdos buenos de esos meses.

—Ahora que lo menciona, Néboa es mejor serie del año según los Mestre Mateo. ¡Enhorabuena!

—Muchísimas gracias. Es ilusionante haber trabajado en una serie con semejante reconocimiento. Néboa es un proyecto muy especial para mí, en el que creo firmemente, y saber que ha gustado al público es un regalo.

—Volviendo a El príncipe constante, háblenos de su personaje.

—Interpreto a Brito que es el gracioso de la función y el contrapunto de lo que está sucediendo en escena. Su labor es reimpulsar el conflicto bélico y hacer de espejo de las grandes pasiones que están representando el resto de los personajes. Brito es muy especial para mí porque creo que en esta vida, para afrontar todos los problemas, para crecer interiormente, y para aprender a no conformarte y cambiar tu realidad a mejor, una de las mejores vías es la comedia.

—¿Y cómo es trabajar con una compañía como el Clásico?

—Está siendo un viaje maravilloso. Era un elenco que no conocía personalmente y con quien nunca había trabajado, aunque sí los había visto actuar en varias ocasiones. La verdad es que creo que, contagiados por este año de pandemia y de vuelta a la nueva normalidad en la que nuestro sector era más vulnerable que otros, se ha creado una unión familiar. Todos teníamos clara la apuesta y trabajamos en la misma dirección. De hecho durante el primer mes de ensayos se generaron muchísimas reflexiones en torno al texto de Calderón de la Barca, aportaciones en las que también nos descubrimos de manera personal y emocional.

—¿La función ya estaba cerrada antes de que llegase la pandemia?

—Sí, la obra estaba programada para noviembre y al final se estrenó el 17 de febrero. Creo que el vernos con la imposibilidad de ejercer nuestro trabajo, el darnos cuenta de que los teatros era lo primero que se cerraba y lo último que se abría, hizo que solo podamos estar agradecidos e ilusionados por subirnos al escenario, más de lo habitual si es posible. Sabemos que somos un porcentaje muy pequeño de nuestro sector los que podemos decir ahora mismo estamos trabajando de lo nuestro y es algo que tenemos muy presente.

—¿Próximos proyectos?

—Pues algo hay. Al terminar la gira con El príncipe constante, tendré la fortuna de embarcarme en un nuevo proyecto con el Centro Dramático Nacional —el ourensano ya participó en obras de la compañía como la premiada «El triángulo azul»—. En esta ocasión será con una obra sobre la Guerra del Rif.