Labase, el emblema modernista de A Coruña, solo se ofrece en alquiler
A CORUÑA CIUDAD
Los propietarios indican que buscan «un proyecto especial» que sustituya al Espacio Mahou
11 abr 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Es un icono del modernismo en A Coruña. En 1911 lo diseñó el arquitecto Juan Galán y en 1990 Carlos Henrique Fernández Coto recuperó su esplendor perdido en una rehabilitación integral de las fachadas y del interior aplaudida por los expertos en patrimonio. Tras el revuelo generado por un anuncio fugaz en el portal Fotocasa sobre una posible venta por 900.000 euros, los propietarios han querido desmentir este punto.
«Fue una iniciativa de la inmobiliaria. Este es un edificio muy especial, para la ciudad y para nuestra familia. La venta no es la prioridad, mucho menos por ese precio», indican desde la familia de Javier Cañás Caramelo, quien en 1990 encargó a Fernández Coto la reforma del inmueble que en el pasado fue el ultramarinos Casa Cabanela.
«Es cierto que, como ya sucedió en el verano del 2020, Espacio Mahou no va a continuar de momento, por lo que vuelve a estar disponible para el alquiler, pero no queremos hablar de precios, ya que lo que primamos es el proyecto, una iniciativa que respete y ponga en valor el edificio, por lo que no hay ninguna prisa ni urgencia», destacan fuentes de la familia Cañás.
La propiedad, situada en plaza de San Andrés, se conforma de un bajo, tres alturas y buhardilla. Está completamente rehabilitada y es sede habitual de la celebración de los mercadillos navideños en A Coruña. Su uso es comercial, como consta en el catastro, y al ser todas las plantas diáfanas, unidas por una escalera y un ascensor que se incorporó en la reforma de los 90, su alquiler sería íntegro.
Totalmente rehabilitado
«A reforma que rematamos no ano 92 foi un reto. O que primou foi devolverlle o aspecto orixinal á casa, especialmente, ao escaparate, que fora modificado segundo as modas dos cincuenta e sesenta, cando foi un ultramarinos. Con Labase recuperou o seu esplendor e tamén dotamos ao edificio de comodidades propias dun inmoble do século XXI, como o ascensor, baños ou unha nova instalación eléctrica», describe el arquitecto y presidente de la Asociación pola Defensa do Patrimonio Cultural Galego (Apatrigal), Carlos Fernández Coto.