El muelle de Trasatlánticos de A Coruña abrirá a la ciudad durante Semana Santa

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

EDUARDO PEREZ

La apertura servirá para comprobar la seguridad antes de recuperar el de Batería

24 mar 2021 . Actualizado a las 09:41 h.

La anunciada apertura de los muelles en A Coruña arrancará este sábado, cuando la Autoridad Portuaria tiene previsto permitir el acceso de los ciudadanos a la dársena de Trasatlánticos que, como el resto del puerto urbano, lleva casi dos décadas cerrada al público.

El muelle estará abierto durante toda la Semana Santa, desde el sábado 27 de marzo hasta el domingo 4 de abril, aunque no está descartado que se prolongue más tiempo. En ese período se expondrá allí la muestra Contra viento y marea, una selección de las fotos enviadas por los vecinos de la ciudad hace un año, cuando finalizó la primera ola de la pandemia. El Puerto señaló el carácter simbólico de la exposición, protagonizada por los propios ciudadanos, y destacó su valor como testimonio gráfico de la lucha contra el covid tanto desde la perspectiva de los servicios sanitarios y de emergencias como de los ciudadanos de a pie. 

La muestra y el muelle podrán verse durante el citado período en horario de 8.30 a 20.30 horas, lo que permitirá a los visitantes pasear frente al mar, disfrutar de la muestra y conocer la situación del resto del puerto, ya que la Autoridad Portuaria instalará paneles con textos e imágenes que explicarán el pasado y las circunstancias actuales de las dársenas de Batería y Calvo Sotelo, que serán las siguientes que se abrirán a la ciudad.

Los ciudadanos podrán entrar en el muelle de Trasatlánticos a través de tres puntos: la puerta situada al final de la calle Entrejardines; por el paseo de la Asociación de la Prensa -situado entre Palexco y el centro de ocio- y por el paseo de Eduardo Vila -ubicado frente a la sede social del Real Club Náutico-.

La apertura de Trasatlánticos permitirá a la Autoridad Portuaria comprobar el funcionamiento de las medidas de seguridad que se pondrán en marcha para el acceso del público. Esas medidas se tendrán que adaptar en el futuro al resto de los muelles, a medida que se vayan abriendo. Este mismo martes ya se inició la colocación de un cierre provisional que separará Trasatlánticos de Batería mientras ese espacio se adapta a la entrada de la gente.

En principio, Batería abrirá al público en verano. Calvo Sotelo tendrá que esperar hasta principios del 2022, cuando terminará el traslado de las empresas que ahora operan allí hasta el puerto exterior de punta Langosteira, y finalizará la demolición de los tinglados que no se conservarán.

Esas aperturas son provisionales, a la espera de que las Administraciones lleguen a un acuerdo sobre el modelo de urbanización que se aplicará en esa zona. Así lo ha explicado la Autoridad Portuaria, que ha insistido en su objetivo de que se llegue a un pacto unánime entre todas las partes. 

La apertura del resto del puerto

Aún sin fecha está la apertura de los muelles de San Diego y Petrolero, cuya integración en la ciudad será mucho más complicada. La principal empresa que opera en esa zona, Repsol, ha iniciado ya su mudanza a Langosteira. Todo el tráfico de crudo se trasladará al puerto exterior en agosto del año que viene, pero en los siguientes años tendrán que moverse los tráficos del resto de productos de la refinería. Si no se adelantan, esas tareas deben quedar listas en el 2027, cuando acaba la concesión de la firma petrolera. Pero incluso entonces es posible que esos muelles no queden liberados, ya que otras empresas que operan en esa zona necesitan una conexión ferroviaria para poder trabajar.

Aunque el ministro de Transportes se ha comprometido a ejecutar la obra, que costará 140 millones y tardará 50 meses, por el momento no hay fecha para construir el tren al puerto exterior, a donde deberían mudarse esas firmas. Mientras no esté operativo, las concesionarias del puerto tendrán que seguir operando desde el muelle de San Diego.

Sanidade rechaza el baño en el Parrote por haber riesgo para la salud y la seguridad

La Consellería de Sanidade informó al Ayuntamiento de que no es adecuado incluir el Parrote en las zonas de la ciudad en las que se permite el baño. Los motivos de ese rechazo son varios. Se considera que existe un riesgo para la salud, ya que las únicas escaleras de acceso «teñen limo e algas durante toda a tempada». Además, «non hai separación» entre el tráfico marítimo y los posibles usuarios. También hay riesgos para la salud porque «a calidade da auga pode estar modificada polos lodos, augas de sentina e residuos oleosos dos barcos (...) Existen verteduras dun colector preto das escaleiras». Además, «non está acreditada a calidade microbiolóxica das augas». El Puerto señaló que el colector es municipal, que los vertidos desde los barcos no se permiten y que la calidad de sus aguas se revisa de forma periódica.

El anterior gobierno local ejecutó una obra para facilitar el baño en esa zona, a la que acudía desde hace años un nutrido grupo de ciudadanos. Pero el baño fue prohibido en abril del 2019, tras ser debatido el asunto en el consejo de administración del Puerto, precisamente por considerarse que había riesgos.

El anterior gobierno local, que había ejecutado la obra, votó a favor de poner las señales de prohibición. Sin embargo, los avisos no se pudieron colocar hasta después de las elecciones, en las que la alcaldía pasó de la Marea Atlántica al PSOE. Aunque habían votado a favor de poner las señales de prohibido, miembros del anterior ejecutivo protestaron contra la decisión. El nuevo gobierno socialista planteó la cuestión a las autoridades sanitarias, cuya contestación negativa fue conocida este martes.