Oleada de robos en las librerías de A Coruña desde Navidades

Emiliano Mouzo A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

ANTÓN, DE ALITA CÓMICS. EL ATRACADOR LLEGÓ A MORDERLE EL DEDO PULGAR.
ANTÓN, DE ALITA CÓMICS. EL ATRACADOR LLEGÓ A MORDERLE EL DEDO PULGAR. MARCOS MÍGUEZ

Al menos cinco negocios fueron asaltados y un empresario, agredido

21 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

Al menos cinco librerías ubicadas en la ciudad están sufriendo robos constantes, «casi a diario». Los empresarios aseguran que se trata de una oleada que comenzó «en la campaña navideña», indicó la titular de la librería Santos Ochoa, ubicada en el número 3 de la calle Teresa Herrera.

Los libreros creen que se debe «a una banda bien organizada», manifestó Toño, de Alita Cómics, en el 94 de la calle Orzán. Y es que manifiesta que los ladrones no se llevan los libros «por sus ansias de leer o culturizarse», lo hacen «porque alguien se los compra».

Los libreros descubrieron mercancía de su propiedad «en algunas tiendas de segunda mano, sobre todo en un local que hay en la avenida de Monelos». Ahí, libros que tienen un precio de entre 15 y 22 euros, se venden, «por los compradores de los libros robados, a 10 o 12 euros». Dicen que a los ladrones recibirán «4 o 5 euros, pero les llega porque todos sabemos para que quieren el dinero», recalcó Toño, recordando el incremento del consumo de heroína.

Alguna librería, como Santos Ochoa, recibió la visita de los ladrones en sus dos locales, en el número 35 de San Andrés, y en la del centro comercial Marineda, «en este a pesar de que en el centro hay vigilancia privada», dijo la responsable del negocio. Pero explica que a estas personas les da igual la vigilancia, las cámaras, «y hasta incluso la policía. Saben que aunque los cojan no les pasa nada».

El modus operandi es de lo más sencillo. Dicen que en «la banda hay hombres y mujeres». Cuando en la librería hay muchos clientes entra una persona, explicó Andrés, propietario de Faro de los Tres Mundos. Y al descuido se hacen con la mercancía, «que guardan en una mochila, el bolso o entre su ropa», indicó Andrés. En otras ocasiones entran dos personas, «una distrae al personal, y la otra roba».

Los ladrones no se conforman con los libros de bolsillo, con obras publicadas ya hace tiempo. «Siempre van a la sección de novedades y eligen los últimos títulos», dicen desde Moito Conto, en el número 25 de San Andrés.

Y también se llevan «las mejores estilográficas o las cajas de música más caras», contó Andrés.

Agresión, y reventa

La mayoría de los robos en las librerías suelen ser limpios. Pero en ocasiones los ladrones son agresivos. Toño, de Alita Cómic descubrió a un ladrón con un ejemplar. Y le devolvió lo robado tras dialogar con él.

Pero ese mismo día llegó una pareja. Se colocaron en lugares distantes. La mujer se fue, pero Toño vio cómo el individuo guardaba algo entre su ropa. Le pidió que le devolviese la mercancía, pero hizo caso omiso y salió a la calle. Toño lo agarró, «pero me pegó un fuerte mordisco en un pulgar», explica.

Los libreros dicen que la policía saben quiénes son los ladrones «y quién les compra la mercancía. Se preguntan por qué no se actúa.