La historia del fantasma de San Carlos que «reinó» en Palmira en el siglo XIX

Alejandro García Chouciño
A. g. chouciño A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

El brigadier Francisco de Mazarredo, perteneciente a una familia de comerciantes y militares de la alta sociedad bilbaína que según las crónicas de la época ofrecía a sus invitados almuerzos de 40 platos, ordenó en 1834 construir el jardín de San Carlos alrededor de la tumba del general Moore. Mazarredo tendrá una estatua en su honor en el nuevo espacio.
El brigadier Francisco de Mazarredo, perteneciente a una familia de comerciantes y militares de la alta sociedad bilbaína que según las crónicas de la época ofrecía a sus invitados almuerzos de 40 platos, ordenó en 1834 construir el jardín de San Carlos alrededor de la tumba del general Moore. Mazarredo tendrá una estatua en su honor en el nuevo espacio. MARCOS MÍGUEZ

Este sábado, 16 de enero, se cumplen 212 años de la muerte de John Moore en la batalla de Elviña

15 ene 2021 . Actualizado a las 16:47 h.

La entrada en vigor de las nuevas restricciones en A Coruña obligan elevar la precaución a nivel social para evitar nuevos contagios. Por ello, un buen plan de ocio para este fin de semana es viajar, pero en el pasado de la ciudad. De hecho, este sábado, 16 de enero, se cumplen 212 años del fallecimiento de Sr. John Moore en la batalla de Elviña. Una fecha que también entraña el nacimiento de una de las leyendas más exóticas y románticas de la urbe: la visita del fantasma de su amante, Lady Hester Stanhope (1776-1839).

El historiador y arqueólogo, Felipe Senén, explica que se trataba de la «flor y nata londinense del momento. Era la sobrina del Primer Ministro británico, William Pitt». Además, ella admiraba enormemente a Moore. «Atención a un detalle, con el general iban dos personas importantes que eran James y Charles Stanhope. Ambos hermanos de Hester. Los dos estuvieron en la batalla de Elviña y cuando Moore es herido de muerte, quien lo atiende es James. Muere en sus manos. Las crónicas inglesas dicen que Moore le envía el mejor abrazo y besos a su amada Lady Hester. Se lo dice a James. Momentos después de la muerte de Moore, muere Charles».

Lady Hester Stanhope
Lady Hester Stanhope

Al recibir el trágico mensaje, Hester toma la decisión «coger un barco en Southampton y venir a A Coruña acompañada de su médico Charles Meryon», indica Senén. Es aquí cuando nace el mito del fantasma. «La gente comenzó a hablar de haber visto a una señora en una noche de invierno que aparece. Se sabe por las crónicas que vino a la ciudad y mismo aquí embarca rumbo al sur. Camino de Cádiz y de África», apunta el historiador.

Lo cierto es que Hester vivió una vida de película porque a partir de ese momento se convirtió en una de las personas imprescindibles dentro de la historia de los grandes viajeros. «Esta mujer se vistió de árabe y se hizo pasar por un hombre. Era muy alta y debía de tener un carácter muy hombruno. Termina habitando en el templo de Palmira y los habitantes de esta ciudad la tomaron como la reencarnación de la reina indígena Zenobia», relata Senén. En este período de su vida se dedicó a dar remedios y a hacer de curandera. Finalmente fallece en Líbano rodeada de gatos «como una mujer inglesa extraña en una sociedad muy machista». Senén destaca que su historia viene muy bien contada en el libro Peregrinos apasionados, viajeros por el mundo de los desiertos árabes, de James C. Simmons, en el que la catalogan como reina de los desiertos árabes.

Ahora, el fantasma de este icono inglés regresa cada 16 de enero a los jardines de San Carlos con el fin de juntarse con su amado. «El propio cenotafio de John Moore es algo simbólico, ya que no tiene sus restos. Lo que si tiene importancia son las bombardas de bronce que hay dentro de ese recinto y que siempre digo que se lleven para el Castillo de San Antón», comenta Senén. Por todo ello, la visita al que es el primer jardín que se levantó en la ciudad es una buena opción para realizar un paseo al aire libre por los rincones de A Coruña.