Los robos tuvieron lugar a media tarde del miércoles en locales de Matogrande y Alfonso Molina
24 dic 2020 . Actualizado a las 16:21 h.Un varón de entre 30 y 40 años asaltó en la tarde del miércoles dos joyerías ubicadas en Matogrande y Alfonso Molina, en A Coruña. El ladrón logró un botín de entre 15.000 y 20.000 euros.
El individuo acudió a la joyería Carrodeguas, en el bajo del número 18 de la calle Juan Díaz Porlier, en Matogrande. Vestía un plumífero grueso, pantalón vaquero, gorro y mascarilla, «de lo más normal, no desconfiamos de él», contó Antonio Carrodeguas, propietario del negocio.
El hombre solicitó a la mujer de Antonio, que se encontraba sola en el establecimiento, que quería ver sortijas de oro tipo sello. La señora sacó de la cámara de seguridad una batea (bandeja) con un muestrario. Cuando le estaba explicando las características y el precio de las piezas, el hombre «cogió la batea y se escapó corriendo. Incluso empujó a tres jóvenes que pasaban por la acera para abrirse camino». La joyera salió tras él y alertó a una dotación policial que pasaba por allí, «pero los policías no me escucharon. Fue una pena», dijo.
En ese momento llegó a la tienda Antonio Carrodeguas, que llamó a la policía: «No tardaron nada en llegar. Vinieron agentes, inspectores y hasta una unidad de la Policía Científica» con la idea de recoger alguna huella que permita dar con el ladrón. También montaron un dispositivo jaula por la zona para tratar de localizarlo, aunque no fue posible. «Sí encontraron el muestrario vacío en una papelera o en un contenedor del barrio», agregaron desde el negocio.
El equipo de investigación solicitó a Carrodeguas las cintas de las cámaras de seguridad y cuál fue la sorpresa del propietario cuando «la empresa R, con la que tengo contratado el servicio, me dice que no las tiene. Es una vergüenza. Estoy indignado, porque si durante el robo ocurre una desgracia tampoco tendríamos pruebas para dar con el individuo», protestó el joyero.
Pero tras este asalto, y mientras se buscaba al ladrón por Matogrande, el delincuente se desplazó hasta Joya 36, en las inmediaciones del centro comercial Carrefour. Allí se encontraba una empleada. El individuo preguntó en este caso por alianzas. La joven le sacó de la cámara de seguridad dos muestrarios, «uno con piezas de oro blanco y otro de oro amarillo».
Y lo mismo que en Matogrande. «Se interesaba por los quilates, los precios...» cuando de repente agarró un muestrario y huyó a la carrera. La trabajadora ni tuvo tiempo de reaccionar y salir tras el ladrón. Solo le quedó la opción de llamar a la policía, «que no tardó nada en llegar». Lo hicieron varias patrullas. «Unas buscaban al ladrón por la zona, revisaban las papeleras y los contenedores, y otras buscaron pruebas, sobre todo huellas, ya que no llevaba guantes».
Fuentes próximas a la investigación aseguraron este jueves que los agentes que llevan ambos casos «puede que ya tengan identificado al ladrón». No descartan que sea detenido «en un breve espacio de tiempo», subrayaron estas mismas fuentes.