Día del Rosario, festivo y polémico en A Coruña

A CORUÑA CIUDAD

Muchos fieles no pudieron acceder a la iglesia al haberse completado el aforo, lo que generó críticas

07 oct 2020 . Actualizado a las 17:34 h.

A veces, el refrán que reza «a quien madruga, Dios le ayuda», se cumple. A Coruña amaneció este miércoles dispuesta a celebrar el día del Rosario, que este año era festivo local. A las 12.00 horas comenzaba el acto principal, la misa solemne con ofrenda floral en la iglesia de Santo Domingo, pero el covid no entiende de tradiciones ni de devoción. Había que seguir unas normas de seguridad y entre ellas, como en todo en la nueva normalidad, estaba la de mantener las distancias. Así, unos 20 minutos antes de que comenzara la ceremonia, el aforo, limitado a 150 personas, ya estaba completo. En la puerta se empezaban a juntar los fieles con cierto enfado, mientras se les comunicaba que ya no se podía acceder y que dentro había gente que ya había llegado sobre las 11.00 horas para asegurarse un sitio.

No faltaron las protestas de quienes llegaban ilusionados por entrar a la iglesia, mientras se pedía a los fieles que no se agolparan. Entre la resignación y la decepción, una mujer mayor explicaba que había venido en bus desde Dorneda: «Bien podían abrir el patio. Ya que estoy aquí, aprovecho y voy a la misa a San Nicolás». Otros preguntaban si se podría entrar al templo una vez que finalizase la ceremonia, algo que se permitiría a medida que se fuera vaciando el interior.

En un corrillo, unos defendían y otros criticaban a la alcaldesa, Inés Rey, quien antes de entrar a la iglesia apuntaba que había que «aproveitar que este ano o día da patroa é festivo, aínda que non se poida festexar como se facía habitualmente polas restricións derivadas da crise sanitaria». En esta ocasión, ni la Ciudad Vieja se convirtió en el foco de atención con la celebración de actividades y conciertos, ni la imagen de la Virgen del Rosario salió en procesión. Eso sí, en las calles hubo cierta animación gracias a un grupo de música tradicional.

Coro separado

La distancia de seguridad también la tuvo que mantener la coral El Eco. Incluso se tuvieron que dividir, y mujeres y hombres cantaron desde puntos diferentes de la iglesia. Otra de las imágenes curiosas que dejó la jornada fue la del párroco saliendo a la puerta del templo de Santo Domingo para dar la comunión a los devotos que intentaban seguir la misa desde la puerta.

Lo que tampoco convenció a los fieles fue que la ofrenda se llevase a cabo en la iglesia y la alfombra floral estuviera instalada en la plaza de María Pita.