Dos empleos y 38 plazas de párking menos en el materno

R. Domínguez A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

J.P.L.

El pequeño aparcamiento situado frente al Hospital Teresa Herrera de A Coruña baja definitivamente la barrera

03 oct 2020 . Actualizado a las 05:00 h.

Esta vez, el pulso de David a Goliat no fue definitivo, aunque a punto ha estado de durar nada menos que cinco años. Esos cumpliría el mes próximo el pequeño aparcamiento del materno, situado justo frente al Teresa Herrera y que nació «por una multa», asegura Alexandre Fernández. Padre de un hijo que, lamentablemente, tiene que visitar a menudo el hospital, en una de esas citas no encontraba dónde dejar su coche y lo encajó, como suele ser habitual en la zona, a caballo entre la carretera y la acera. Al volver, se encontró la receta policial. «Vi la parcela y decidimos alquilarla», resume de aquel impulso, una pequeña venganza que se convirtió, además, en el medio de vida para él y para su socia.

Desde entonces, ofrecía algo más que un lugar donde estacionar. «Sé muy bien lo que es tener que ir al médico y no encontrar sitio, y estar preocupado por la consulta y por el coche; por eso a mis clientes, si llegaban y no había plaza, les decía que se fuesen, que ya se lo aparcaría yo». Ahora, esos mismos clientes agradecidos por el trato personalizado «se han ofrecido a reunir firmas, pero ya no puedo más», dice Alexandre, el impulsor de un estacionamiento de 38 plazas que ahora baja definitivamente la barrera.

El último fallo argumenta la orden de cierre en que «esta parcela no se puede destinar a esta actividad empresarial», explica. «Sorprendentemente -añade- unos metros más atrás sí pudieron construir un párking aún en zona verde». Ahí lo deja Alexandre Fernández, que asegura que «ya no puedo seguir recurriendo, ya han sido muchos gastos». Se refiere a lo invertido en los distintos procesos judiciales para continuar con su mini párking abierto y desarrollando un servicio que para los dos socios era, además, su puesto de trabajo.

«No han parado hasta que nos han echado», lamenta en estos días duros en alusión a las sucesivas denuncias planteadas por Copasa -concesionaria del cercano párking de 366 plazas promovido por la Empresa Municipal de Vivienda-, primero por licencia ilegal, después contra la prórroga del permiso, más tarde contra su petición de suspender el cese de actividad por tratarse de su única fuente de ingresos... Con dos niños y una pandemia que lo ha puesto todo patas arriba, gestiona ahora el papeleo del cierre para abrir otra nueva etapa: «Pierdo la empresa y el empleo, toca ponerse a buscar... lo que salga», concluye.