La firma de un crédito por 7 millones de euros pone fin a un conflicto judicial de casi 20 años
06 jun 2020 . Actualizado a las 11:00 h.El alcalde del Concello de Miño, Manuel Vázquez Faraldo, ha firmado esta misma mañana la formalización del crédito para el pago a los expropiados de Fadesa poniendo fin así a un conflicto judicial de casi 20 años. El acuerdo se rubricó en el salón de plenos del Ayuntamiento a las 9.30 horas, con la presencia del propio regidor, la teniente de alcalde, Catalina Morado, la interventora y el secretario-accidental, así como José Manuel Vilariño y José Ulfe, dos representantes de Abanca, la entidad que hace de intermediaria entre la Administración local y el Instituto de Crédito Oficial.
El límite para efectuar el pago era el 31 de mayo, pero tras la declaración del estado de alarma los plazos se habían dilatado. Aún así, el cobro no se retrasará tanto ya que está previsto que el banco ingrese las cantidades cara la tercera semana de este mes de junio. Debido principalmente al proceso de expropiación de la macrourbanización de Fadesa, el Concello presentaba al cierre del ejercicio 2019 una deuda total de 22,3 millones de euros, una cifra inasumible para cualquier municipio de 6.000 habitantes. En dicha cantidad están incluidos estos 7 millones de euros, concedidos al Concello por parte del Ministerio de Hacienda, para abonar los intereses a los expropiados y que hoy mismo se ha hecho oficial. «El gobierno local, a través de múltiples contactos con el Ministerio de Hacienda, la Deputación y la Xunta, dio el paso para buscar financiación y desahogar así la situación de la Administración», explican fuentes municipales.
En el verano del 2019, Manuel Vázquez Faraldo inició una serie de contactos con los expropiados y sus representantes hasta alcanzar el acuerdo, por el cual estos renunciaban al recargo de intereses al que tenían derecho a cobrar, unos 300.000 euros anuales, que se firmó en septiembre del 2019. El alcalde, Manuel Vázquez Faraldo, quiso agradecer esta mañana, una vez más, «tanto al Ministerio de Hacienda la concesión del préstamo como a los expropiados por su generosidad y su buena disposición, permitiendo con este acuerdo hacer viable esta operación», aportaba el regidor. Con esta firma se pone fin a un conflicto judicial de casi 20 años. «Los expropiados tuvieron que acudir en cadena a todo tipo de tribunales, ganando sentencia tras sentencia. Ahora evitamos que la deuda siga creciendo, y desde aquí animo también a pensar en la reactivación de la economía local de nuestro pueblo de Miño y hacer un buen uso de estos fondos», indicó el alcalde, Manuel Faraldo.