Peluquerías y ópticas adaptan instalaciones y acopian material para reabrir el lunes al público
02 may 2020 . Actualizado a las 11:05 h.Peluquerías, centros de estética y ópticas de la ciudad llevan preparándose varios días para reabrir al público el próximo lunes. La mayoría de los establecimientos han conseguido de mascarillas, pantallas de protección, guantes, gel hidroalcohólico, productos de desinfección y, en algunos casos, también de mamparas para la separación entre clientes. Los peluqueros explican que también han hecho un importante esfuerzo, no tanto económico sino logístico, para poder comprar material desechable como cubresillones, capas o toallas. «Nosotros cumplimos todos los parámetros que recomiendan las mutuas y las asociaciones pero, a día de hoy, todavía no hemos concretado las citas porque no sabemos cuántos podemos estar trabajando y cuántos clientes podemos atender a la vez», explica Dyango Lorenzo Rodríguez, gerente de las dos peluquerías de caballero Barborius en A Coruña. «Vamos esperar al último momento por si el Gobierno concreta algo más durante el fin de semana. Tengo a 150 personas en lista de espera. Así que trabajo vamos a tener para cuatro o cinco días seguidos», explica. Indica también que, para garantizar la seguridad de trabajadores y clientes, van a minimizar el trasiego en la zona de lavado y eliminar tintes, desrizados y otros trabajos técnicos. En cuanto al arreglo de barbas y patillas... «Será difícil atender al cliente con mascarilla, evidentemente. Así que le pediremos que se la retire un momento».
Noe Ferreño, que regenta el centro de estética La Crema, confirma que en su lista de espera está dando prioridad a clientes con tratamientos ya pautados o con citas que se quedaron canceladas con el estado de alarma. Dice que este lunes dejará de estar en ERTE, «pero solo podremos trabajar al 30 %; no se puede incorporar toda la plantilla porque serían más gastos con menos clientes». Así que a una parte de la gente seguirá atendiéndola como hasta ahora, a través del teléfono o enviando los productos a domicilio. «E incorporaremos un nuevo servicio Face to face, por videollamada con protocolos personalizados».
En este sentido, indica que los primeros días intentará atender al mayor número de clientes,especialmente a los que tuvieron que interrumpir sus tratamientos. «Después de ellos, iremos cubriendo la agenda», explica esta empresaria. «Tenemos algunas clientas que son pacientes oncológicos, otras que siguen tratamientos despigmentantes por tipos de melasmas en piel, otras por rosácea o cuperosis... En general son tratamientos que necesitan una continuidad para que resulten eficaces», añade. Y, precisamente, para que no hubiera una discontinuidad, desde la declaración del estado de alarma estuvo enviando los tratamientos personalizados a cada casa. «Si es fuera de A Coruña, lo enviamos por un transportista y si es en la ciudad, a través de VanenBike, junto con las pautas que deben seguir. Así estamos atendiendo a unas 85 personas, e intentando impulsar nuestra venta on-line», indica.
Pendientes del «BOE»
Mónica Rial Braña, propietaria de la peluquería Gabanny, indica que todavía no está preparada para abrir el día 4 y, «aunque quiero y necesito trabajar debería hacerlo con un mínimo de información y seguridad». Dice que el BOE no aclara nada y que todo son recomendaciones extraoficiales. «Todos somos conscientes de las cosas básicas que necesitamos, como mascarillas, guantes... y como no he conseguido suficientes epis, tendré que esperar al día 11». Espera que, para entonces, también aclaren el aforo que pueden tener: «¿Un cliente de cada vez con seis empleadas? Eso es insostenible», indica.
8.000 despidos
Asun Catoira, que regenta el local Aquarell en Novo Mesoiro, es secretaria de la cooperativa de peluquerías Euronor y coordinador de la Plataforma de Peluquerías Unidas de España (PPUE). Confirma que ya han solicitado ser de los primeros en reanudar la actividad puesto que ya suelen usar material de protección. Indica que en Galicia podrían llegar a cerrar 11.100 de las 25.000 peluquerías existentes, con una estimación de 8.125 despidos.
Sin tantas incógnitas abrirán el lunes las ópticas de la ciudad. Manuel Sánchez Rubal lleva días preparándose para hacerlo, con más o menos normalidad, tres de las cinco ópticas que tiene en el ámbito de A Coruña. Explica que ya ha hecho acopio de mascarillas, guantes, gel hidroalcohólico, máscaras de protección individual e, incluso, ha adquirido una máquina que permite limpiar a fondo las lentes. «Pones la gafa en una bandeja y ya va directamente a la máquina, que utiliza radiación ultravioleta». Explica que han desechado la limpieza con ozono porque, a la larga, acaba causando daños en los elementos metálicos de las gafas.
El empresario aclara que, hasta el momento, sus negocios tan solo abrían en horario reducido los lunes, miércoles y viernes, para atender las urgencias. «Mantendremos esta medida hasta el día 11 en las ópticas de la calle Barcelona y Juan Flórez, pero las otras tres abrirán ya el próximo lunes de 10 a 14 horas. Por las tardes estarán cerradas. Vamos a tantear cómo va la cosa y las necesidades de los clientes para, después, avanzar en las decisiones». Sánchez Rubal indica que están acostumbrados a trabajar con cita previa y que, ahora más que nunca, seguirán haciéndolo. Aclara también que van a priorizar la seguridad tanto del cliente como de los empleados, adaptando los protocolos a las necesidades de cada momento. «Por ejemplo, nosotros no hemos encargado mamparas. En caso de hacer revisión ocular, ya utilizamos aparatos que no precisan una proximidad o contacto con el cliente y otros que ya incorporan pantallas de metacrilato. Y en la optometría seguimos unas normas higiénicas, como puede ser el lavado de manos, que están totalmente incorporadas al día a día o interiorizadas por los profesionales».