Las rachas, que superaron los 117 kilómetros por hora, arrancaron de nuevo parte de la cubierta de Riazor, lanzaron el cierre de una terraza desde un octavo en Rosalía de Castro, levantaron la techumbre del polideportivo de A Sardiñeira y dejaron un reguero de desprendimientos y árboles caídos
22 dic 2019 . Actualizado a las 16:41 h.La borrasca Fabien deja su huella en la ciudad, uno de los municipios con más incidencias de la comunidad. Si hasta la una de la tarde de este domigo ya había provocado más de 220 intervenciones de Bomberos y Policía Local solo en A Coruña, el Centro Integrado de Atención a Emerxencias el 112 contabilizó hasta las ocho de este domingo 567 incidencias en la provincia y 48 en el casco urbano, a las que se sumaron otras 31 en Oleiros.
Las centralitas del 092 y de los Bomberos de A Grela, que a media tarde del sábado ya habían recibido más de doscientas llamadas solicitando ayuda, no daban abasto para atender las demandas por los rotos del temporal, que volvió a levantar parte de la nueva cubierta del estadio de Riazor y levantó parte de la techumbre del polideportivo de A Sardiñeira.
Los primeros golpes del temporal se notaron ya desde la mañana. Alrededor de las once, poco después de que la estación meteorológica del dique de abrigo registrara una racha de 117 kilómetros por hora, un golpe de viento levantó el cierre de una terraza en un octavo piso de la calle Rosalía de Castro, a la altura de los números 8-12, y precipitó la estructura sobre la vía. Afortunadamente, el material no afectó a ninguno de los viandantes, pero sí causó importantes daños en dos vehículos que se encontraban estacionados en la calle.
Las fuertes rachas, que rebasaron los 110 kilómetros por hora en todas las estaciones de MeteoGalicia y Aemet en la ciudad, arrancaron árboles de cuajo en la plaza de Palloza y San Diego, y provocaron desprendimientos en la ronda de Outeiro y en Os Rosales, donde hubo que cerrar temporalmente un tramo de la calle Emilio González López por caída de cascotes de la fachada del número 6. También en San Andrés, a pocos metros de la iglesia castrense, la Policía Local tuvo que acordonar esta tarde un trecho de acera sobre el que se precipitaron varias tejas y al que acudieron los bomberos para asegurar la estructura. Y en la Marina han vuelto a venirse abajo partes del alumbrado navideño, que ya tuvo que reinstalarse hace unos días, tras derrumbarse al paso del temporal Elsa. En el centro comercial Marineda City, el aire se llevó por delante dos de las casetas del poblado navideño, en el polideportivo de A Sardiñeira levantó parte de la cubierta, en la estación de ferrocarril varias chapas se desplomaron sobre las vías, y también se vio afectada la cubierta de la central de ambulancias, junto al Oncológico. Además, en el punto limpio de A Grela una gran valla publicitaria cayó sobre las instalaciones.
Los operarios se afanaban en la mañana del domingo en restrablecer la normalidad en distintos puntos de la ciudad, después de que desde las doce de la mañana se rebajara el nivel de alerta. Entre otras incidencias, el viento derribó un árbol en el cementerio de Feáns que a primera hora trocearon los operarios municipales para su retirada.
Rótulos desprendidos, andamios caídos, cristales rotos, tendales amenazando con caer a la calle, tejas, chapas metálicas, cascotes y canalones con riesgo de desplomarse, cables y alumbrados navideños descolgados se multiplicaron a lo largo de toda la jornada prácticamente por todo el mapa urbano mientras los miembros de Protección Civil se encargaban de vigilar la costa.
El temporal, que continurá en las próximas horas tanto en tierra como en el mar, con olas de 10 metros, está complicando complicó la operatividad del aeropuerto de Alvedro donde se cancelaron seis vuelos y se desviaron otros cuatro. Entre los afectados se encuentran los miembros del Liceo de Hockey, que anunciaron que después de hacer todo lo posible no podrán llegar a las 12.00 horas de hoy al Palau para jugar allí. Agradecieron el trato a Vueling, por las opciones que les buscaron, pero finalmente no competirán. También Marta Sánchez se vio afectada por las cancelaciones y no pudo participar en el concierto de los ochenta organizado en Palexco.
El viento y la lluvia afectó además a la circulación rodada en el casco urbano y en las carreteras de toda la comarca. A media mañana se produjo un accidente en los accesos a la ciudad, en la avenida de Alfonso Molina, donde un coche se salió de la vía a la altura del barco decorativo instalado en el margen ajardinado, junto al acceso a Matogrande.
Una mujer herida
Fabien no ha pasado de largo tampoco por el área metropolitana, donde fueron múltiples los viales afectados por árboles caídos y asfalto abierto. En Oleiros, una mujer resultó herida leve en el parque de Iñás al caerle encima una farola en la espalda cuando llevaba una niña en brazos, por lo que ambas fueron trasladadas en ambulancia a un centro sanitario.
En Culleredo, en la ría Fonte da Balsa, un talud se desplomó semienterrando un vehículo en el que habitualmente duerme una persona. El temporal derribó un cedro y bloqueó el acceso a la urbanización Lamastelle. Los vecinos lamentaron que llevaban años advirtiendo al ayuntamiento del riesgo de desplome y subrayaron que, por suerte, el árbol cayó sobre la calzada en vez de sobre las viviendas.
En municipios como Cambre,Carral y Oleiros el temporal, además, dejó sin luz a numerosos vecinos. Los bomberos de Arteixo tuvieron el sábado numerosas salidas, siendo la más importante las cuatro horas que trabajaron en una manzana de la plaza de la Ría número 1, en O Temple, donde voló el tejado de un bloque de viviendas, que afectó a una tubería de gas. La actividad continuó de noche, ya que «estuvimos saliendo seguido», explicaron este domingo desde una centralita que echó humo hasta las cuatro de la madrugada. Dos postes de la luz caídos en la urbanización O Castelo, uralitas desplomadas en la calle Colombia de Arteixo y un accidente en la avenida de Finisterre 253 fueron algunos de los servicios prestados esta noche.
También los bomberos del parque comarcal de Betanzos tuvieron una jornada compleja, con múltitud de avisos de árboles caídos y tejados afectados, que prosiguió durante la madrugada con 19 salidas ha distintos puntos para atender incidencias sin daños personales.
En total, en Culleredo contabilizaron entre 60 y 70 incidencias. En Cambre los cortes de luz afectaron durante todo un día a Lema, Cecebre y Pravio entre otros lugares y hubo desprendimientos de tejas de un edificio en la plaza da Ría. Un árbol caído obstruyó un tramo de la N-550. Cortes de luz también hubo en Abegondo, Bergondo y puntos de Arteixo. En Carral y Miño se registraron varios árboles caídos y en este último municipio voló también parte de la iluminación navideña.
El centro cívico Os Mallos dio cobijo a cerca de 20 sintecho
Cuando viene una gran borrasca, como es el caso, el Ayuntamiento envía a la Policía Local y a los trabajadores del Semus (Servicio Municipal de Atención a Urgencias Sociales) a recorrer la ciudad en busca de personas sin hogar para invitarlas a pasar la noche al centro cívico Os Mallos. Ayer, el equipo municipal volvió a salir a la calle para acudir a todos esos lugares donde saben que hay gente a la intemperie. Uno a uno, trataron de convencerlos de dormir bajo un techo, donde se les proporcionarían mantas y comida, así como una salita para ver la televisión.
La jefa de servicio de Acción Social, Regla Dávila, explicó que la pasada noche no se esperaban más de 20 personas «porque Padre Rubinos tenía más plazas de las habituales».