El coste de sacar una oposición: dos años de estudio y cerca de 4.000 euros

Tamara Montero
tamara montero SANTIAGO / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

rober amado

La preparación para optar a una plaza pública supone «un cambio de vida», avisan en las academias

11 oct 2019 . Actualizado a las 15:58 h.

La fecha del 19 de octubre está marcada en rojo para cerca de 5.000 opositores gallegos convocados en A Coruña para las pruebas de acceso al cuerpo administrativo y auxiliar de la Administración general del Estado. Ahí se la juegan tras un elevado coste, en horas de estudio y en dinero. ¿Cuánto? «O custo de preparar unha oposición é difícil de medir material e inmaterialmente». A Alberto López, de Nós Oposicións, la experiencia y el contacto con los aspirantes que escogen la academia para estudiar los temarios de acceso a un puesto público le ha enseñado que opositar no solo tiene un coste monetario. También, y muy importante, personal y social.

Lo primero es ese sacrificio personal que supone preparar unas oposiciones. «É un cambio no teu modo de vida e durante todo o proceso moitos alumnos pasan por períodos de altos e baixos». Así que solo en lo personal ya hay «un custo moi alto para todos os opositores que preparan a conciencia os exames».

Después está el coste temporal y social de dedicarse a opositar. «Unha grande parte compaxinan familia, traballo e estudo a partes iguais», lo que convierte en «incalculable» el valor del tiempo dedicado a estudiar. De todos modos, y aunque son menos, también hay casos de personas que pueden dedicar todo su tiempo a estudiar y repartir a partes iguales el tiempo de estudio y de ocio.

También hay que tener en cuenta los ciclos de convocatorias. Algunas (como en los últimos años las de educación) son anuales, y eso significa un mayor desgaste psicológico. En otros casos, el ciclo es más largo y se convocan las pruebas cada dos o tres años, con lo que permiten períodos de descanso que benefician al alumnado.

Y por supuesto, está el coste económico, también muy variable. En las academias, apuntarse a la preparación de los exámenes puede suponer entre 85 y 140 euros mensuales, dependiendo de la oposición, con lo que asistir nueve meses (un curso académico) a la academia supone desembolsar entre 765 euros (para las oposiciones más baratas) y 1.260 euros para la preparación de las pruebas de mayor coste.

Los tiempos de preparación

¿Cuánto se tarda en estar lo suficientemente preparado para sacar la plaza? «Hai quen ten sorte e a acada con poucos meses, ou períodos inferiores ao ano», reconoce Alberto López. Pero un estudiante medio necesita entre dos y tres años para conseguirlo. Eso significa una inversión -teniendo como modelo los 9 meses de un curso académico- entre 1.530 (para una oposición de 85 euros al mes en la que se invierten dos años) y los 3.780 que supondría preparar los exámenes de 140 euros al mes durante tres años. Eso sí, «en moitos casos esta carreira de fondo que é a oposición chega a aproximarse á década ou mesmo superala, dependendo do tipo de oposición».

Y después, hay que pagar las tasas. Las de los exámenes del día 19 de octubre en A Coruña son de 15,27 euros para el cuerpo administrativo y de 11,43 euros para el cuerpo auxiliar de la administración.

Cada proceso tiene un coste medio de 25.000 euros para la Administración, y supone movilizar a 360 personas

¿Y cuánto cuesta organizar una oposición para las administraciones? Cuesta. La del 19 de octubre cuesta 53 aulas en cuatro facultades de A Coruña (Económicas, Sociología, Informática y Caminos). Y cuesta 170 personas, entre vigilantes y coordinadores, así como dos unidades de colaboración, conformadas por cinco personas cada una, que se encargan de coordinarse con el Instituto Nacional de la Administración Pública. Por supuesto, organizar una oposición cuesta dinero. En este caso, algo más de 30.000 euros. Es lo habitual. Aunque los costes varían mucho dependiendo del proceso, en los de función pública de este 2019 (al margen del Sergas) costaron, de media, unos 25.000 euros.

La de la Administración General impresiona, pero más lo hacen los procesos que tienen lugar en el recinto ferial de Silleda, con capacidad para albergar a hasta 15.000 personas en posición de examen: sentadas y con una separación suficiente entre ellas. Pocos recintos cubiertos en España tienen esta capacidad y por eso Silleda se ha convertido en una de las imágenes icónicas de las oposiciones. En cada proceso tardan de media 6 o 7 días para el montaje, y pueden trabajar entre 4 y 12 operarios.

«Silleda ofrece a vantaxe da súa centralidade dada a súa situación xeográfica», explican desde la Consellería de Facenda. Su capacidad también garantiza la simultaneidad del proceso (todo el mundo hace el examen a la vez) y cumple los máximos requisitos de seguridad.

«É un reto pola magnitude e os medios precisos»

La Xunta encomienda a la Fundación Semana Verde de Galicia la logística, un «reto pola magnitude e os medios precisos». Hay que tener en cuenta el alquiler de espacios, la vigilancia y la seguridad, los servicios de limpieza, los operarios de servicios múltiples, la megafonía, el alquiler de sillas y mesas, los gastos de imprenta y calefacción, la contratación de los servicios de ambulancias para hacer frente a cualquier eventualidad, la coordinación y el apoyo policial y los ordenadores, de ser precisos.

Se trata de una máquina enorme y bien engrasada que funcionó este año para la celebración de las pruebas de auxiliares administrativos (C2), a las que había convocadas más de 10.000 personas. Eso obligó a habilitar 41 puertas y movilizar a otros tantos jefes de puerta, de los cuales dependen a la vez hasta seis vigilantes (varía según el número de aspirantes asignados a cada puerta). En total, se movilizaron 360 colaboradores. La responsabilidad de los jefes de puerta es máxima, porque un error en el protocolo puede suponer poner en riesgo la integridad de las oposiciones e incluso llevar a la anulación. Por eso los jefes de puerta deben tener experiencia previa.