El dueño y la cocinera ucraniana se casan en su bar

Pablo Portabales
PABLO PORTABALES A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

cedida

José Ángel y Nina se vistieron al estilo de Ucrania, se dieron el sí quiero en María Pita y lo celebraron por todo lo alto en su cafetería de la ronda de Outeiro

17 sep 2019 . Actualizado a las 09:27 h.

Lo nunca visto. La expectación fue enorme alrededor del número 253 de la ronda Outeiro. El dueño y la cocinera de la cafetería Dinquedín celebraron su boda en el propio local. «¿Dónde me voy a casar mejor que en mi bar? Además no éramos muchos, solo unos cuarenta y pico entre familiares, amigos y clientes», explica el novio-hostelero, José Ángel Domínguez Sieira, de 55 años. El viernes tuvo lugar la boda civil en María Pita y después continuaron la fiesta en el negocio.

Pero hubo más detalles sorprendentes. La novia, Nina Kbozsista, de 50 años, es de Ucrania y por eso decidieron que la boda fuese mitad galega, mitad ucraniana. «Encargamos la vestimenta al país de mi mujer. Son unas camisas bordadas en blanco y rojo que hacen a mano. Las telas estuvieron 15 días retenidas en aduanas y llegaron con el tiempo justo», recuerda José Ángel, que conoció a Nina por Internet. «Después nos conocimos en persona. Ella se dedicaba a cuidar a unos ancianos y se vino conmigo a la cafetería», confiesa. La boda ucraniana de la ronda de Outeiro tuvo más detalles curiosos.

Cuando llegaron les esperaba la hermana de la novia con una especie de roscón con un cuenco en medio lleno de agua bendita. «Dijo unas palabras, que no entendí, y nos bendijo», apunta el novio. Una coral gallega dedicó una canción a la pareja del Dinquedín y en la cena sirvieron salpicón y pastel de marisco y dos platos típicos de Ucrania. Me dicen los nombres pero son complicados de reproducir. Digamos que un ravioli relleno y una hoja de col que envolvía carne y arroz. Si ya resulta difícil que se vuelva a celebrar una boda en una cafetería de la ronda de Outeiro, no digamos si además es al estilo ucraniano. Si quieren pasar por allí a felicitarlos por el enlace esperen al viernes, que será cuando se incorporen al trabajo después de unos días de luna de miel por A Coruña.