La policía y las entidades financieras alertan de una oleada de clonaciones de tarjetas en la ciudad

Alberto Mahía A CORUÑA

A CORUÑA CIUDAD

Un policía investiga un delito a través de Internet
Un policía investiga un delito a través de Internet POLICÍA NACIONAL

Varios coruñeses recibieron cvargos en sus tarjetas por compras en el extranjero

24 may 2019 . Actualizado a las 13:08 h.

«Te han clonado la tarjeta, es algo que sucede de forma habitual y en las últimas semanas estamos teniendo bastantes casos igual que este». Esta es la información que recibió uno de los últimos denunciantes que acudió a la Comisaría coruñesa tras detectar una serie de pagos irregulares en su cuenta bancaria que él no había realizado nunca. Eran, además, cargos por compras realizadas a través de Internet, así como cobros por compras realizadas desde lugares remotos como Estados Unidos, a los que este coruñés nunca ha viajado.

Tanto el banco como la propia policía le reconocieron que no es un caso aislado y que en las últimas fechas se está detectando un repunte en cuanto al número de denuncias por clonación de tarjetas bancarias en A Coruña.

Las estadísticas disponibles acreditan la tendencia al alza de esta modalidad delictiva. El número de denuncias creció de forma exponencial en los últimos seis años. En 2011 apenas se detectaban 60 casos al año en toda la provincia. Un año después el número de afectados crecía a 107, en 2013 eran 165, en 2014 ascendieron ya a 219 y en 2015 fueron 232. En 2016, último dato disponible por el momento, la cifra de denuncias por estafas relacionadas con tarjetas ya se disparó hasta los 351 casos.

Los datos pueden ser robados o copiados de varias formas, tanto físicamente con un aparato que se llama skimmer (que puede estar instalado en cajeros o en terminales de puntos de venta); como a través de internet. En este último caso sería utilizando lo que se denomina como phising, es decir, obtención de los datos de la tarjeta de manera fraudulenta o engañosa a través de un correo electrónico suplantando al propio banco o incluso a empresas legales. Para evitar estos engaños lo mejor es realizar todas estas operaciones a través de las páginas oficiales de las compañías.