El deportista, que fue subcampón de España, envió a la víctima al hospital
07 may 2019 . Actualizado a las 12:19 h.Fue subcampeón de España de kick boxing y esta mañana se sentó en el banquillo de los acusados para responder por un delito de lesiones por el que la Fiscalía pide que sea condenado a tres años y medio de prisión.
A. D. V., defendido por el penalista Ramón Sierra, el deportista negó los hechos por los que fue juzgado. La acusación, en cambio, insistió una vez más en que el imputado fue la persona que el 14 de abril del 2018 le propinó un solo puñetazo a un hombre que lo envió al hospital con importantes heridas. Ocurrió sobre las siete de la madrugada de aquel día en las proximidades del establecimiento Oh Coruña.
Según afirma el fiscal, el acusado se acercó a la víctima y solo le dio un puñetazo en el rostro. Bastó para que el agredido cayera al suelo y tuviese que ser tratado de una fractura tetrapódico malar izquierda con hundimiento y enfisema subcutáneo bipaperbaql, hundimiento infraorbitarioizquierdo y hundimiento vestibular. Eran de tal gravedad las lesiones, que tuvo que ser intervenido, teniéndole que poner tres placas.
Como consecuencia de la agresión, a la víctima le quedaron como secuelas una afectación del nervio trigémino, material osteosíntesis máxilo facial y una cicatriz en el ángulo externo del ojo izquierdo de tres centímetros.
El acusado, con cuatro antecedentes no computables, negó haber sido él la persona que dio el puñetazo, mientras que la víctima lo identificó no solo el día de los hechos, sino que ayer se ratificó frente al juez, que emitirá su sentencia dentro de unas semanas.
Ayer también fue juzgado un joven por otro delito de lesiones., A este le piden 3 años de prisión como supuesto autor de un delito de lesiones y otro de atentado a la autoridad.
Los hechos ocurrieron el 13 de febrero del 2018 en un bar de la calle San Vicente. Según la Fiscalía, el procesado se encontraba molestando a uno de los clientes, por lo que fue avisada la policía. Cuando llegaron los agentes, lejos de tranquilizarse, se enfrentó a los mismos, causándole una lesión a uno de ellos. Tuvieron que reducirlo. Aparte de la prisión, deberá indemnizar al agente en 600 euros.