El exceso de coches, la falta de plazas de aparcamiento y la escasez de líneas de bus dificultan el movimiento dentro de un parque que presume de plena actividad. Los empleados denuncian amenazas e incluso una trabajadora asegura haber sufrido «coacciones por aparcar aquí»
24 abr 2019 . Actualizado a las 19:11 h.Los empresarios, los trabajadores y también los usuarios del parque de A Grela tienen una reivindicación común. El polígono no adolece de actividad, sino de un plan de movilidad que descongestione sus carreteras, con coches en doble o triple fila a diario. Su céntrica ubicación es un arma de doble filo. Está bien posicionado, pero crecer cuando se está encajonado en una ciudad que a su vez es una península, no es un asunto fácil.
Las cifras del polígono
Superficie y densidad. El parque empresarial de A Grela es el más antiguo de Galicia. Abrió sus puertas en 1963. También es el que tiene mayor densidad de empresas. En sus 1.421.818 metros cuadrados conviven más de 550 compañías. También hoteles, comercios, cafeterías o bancos. Genera más de 20.000 empleos directos. Es el principal motor económico de A Coruña y cuelga el cartel de completo. No tiene ninguna parcela disponible, anuncia en su página web.
Accesos
Centro urbano. El parque está integrado en pleno centro urbano. Tiene conexión directa con la tercera ronda que, a su vez, lo une con el polígono de Pocomaco, el aeropuerto y la A6. La avenida de Finisterre, la de Arteixo, la ronda de Outeiro y Salgado Torres son las cuatro vías urbanas para llegar a él.
Plazas en la calle
El «calvario» de aparcar. Aunque sus arterias, las calles Copérnico, Isaac Peral, Torres Quevedo, Severo Ochoa, Juan de la Cierva, Gutenberg, Galileo Galilei o Gambrinus, cuentan con plazas marcadas, tanto en batería como en línea, estas no se extienden a lo largo de toda la avenidas. Aparcar es a veces una misión imposible. «Plazas señalizadas como tal hay pocas. Con el tiempo y la práctica tiras del ingenio para inventarte alguna que no existe. Procuro no impedir el paso a otros y soluciono así», admite Marta Pérez, que trabaja en una de las naves de la calle Gambrinus. «Hay huecos donde aún se pueden crear plazas», apunta Teresa Firvida, la gerente de la Asociación de Empresarios de A Grela.
Retranqueo
Los cinco metros privados. El retranqueo es el espacio de 5 metros delante de las fachadas. «No es un suelo público, aunque lo pueda parecer porque muchos edificios no lo cerraron», aclara Firvida. Como no hay vados, muchos estacionan ahí. «Aparco a continuación de los metros 'acordados' y, aun así, me bloquean el coche los trabajadores de la nave», critica Mónica Fernández Liñares, la trabajadora de una empresa del polígono que llegó a juicio por las amenazas recibidas. «Necesitamos varias soluciones, no hay una única. Desde aceras, somos un barrio más de la ciudad, a mejorar el transporte público y generar los máximos aparcamientos posibles. Aquí no solo trabaja o viene de compras gente de A Coruña, sino de toda el área metropolitana. Nuestro problema no es de actividad, sino de movilidad», insiste la gerente de A Grela.
Aparcamientos públicos
Párkings. Hay tres privados en los que se puede pagar por aparcar o reservar plazas. Son el Work Center y el del Edificio BCA, en Copérnico, y el Miramar II, en Isaac Peral. «Aparcar es un calvario y no puedo pagar todos los días ocho horas en un párking, que es lo que dura mi jornada», responde Carmen, empleada en una nave de la calle Gutenberg.
Transporte
Autobús urbano. Solo una línea de autobús urbano discurre por A Grela. Es la 11, que parte de As Lagoas hasta Marineda. Lleva 40 minutos llegar desde el centro. La líneas 24, 6A, 6 y la 14 tienen paradas en las inmediaciones. «Se deberían crear glorietas en la avenida de Finisterre con las intersecciones de entrada para facilitar la circulación de los autobuses y ampliar las líneas», cuenta Teresa Firvida.
Proyecto anunciado
Breogán Park. El nuevo centro comercial anunciado para la parcela que ocupa Dolce Vita incluye en su proyecto 550 plazas de aparcamiento de uso público que se añadirían a las 3.000 subterráneas existentes. De llevarse a cabo la infraestructura, todavía hay que esperar al 2021, para cuando se anuncia su apertura.
Sugerencias vecinales
Aprovechar descampados. Los usuarios del polígono proponen aprovechar las parcelas libres. «Existe unha parcela grande e baleira que a asociación de empresarios podería habilitar como se está a facer en Pocomaco», apuntó Anxo González en el foro municipal A Porta Aberta. «Apenas hay terrenos libres», dicen desde el asociación empresarial. Un proyecto que llegó a presentarse ante el Ayuntamiento en una parcela libre en Galileo Galilei fue rechazado hace un año por exceder el millón de euros asignado al programa de Presupostos Participativos.
