El presentador recala este domingo en el Palacio de la Ópera como protagonista del musical titulado «Grandes éxitos»
19 mar 2019 . Actualizado a las 16:44 h.El televisivo Jorge Javier Vázquez vuelve a los teatros con Grandes éxitos, un musical hecho a su medida en el que interpreta a un presentador de televisión al que le encargan grabar un disco en el que tendrá que trabajar con una antigua enemiga. Estará este domingo en le Palacio de la Ópera a las 20.00 horas (entradas desde 25 euros).
-¿Está basado en hechos reales?
-La verdad es que no, pero que te toque trabajar con alguien con quien no te llevas precisamente bien es algo que podría llegar a suceder en todas las profesiones.
-Pero se interpreta a usted mismo.
-El personaje lleva mi nombre, pero creo que tiene poco que ver conmigo. El director, Juan Carlos Rubio, ha hecho una caricatura conmigo, ha creado un personaje del mundo de la televisión muy endiosado, que cree que es el centro del universo… Es una figura que yo creo que en estos momentos es muy difícil de encontrar.
-Aunque, como las meigas, «habelas, hainas».
-Son figuras tan estereotipadas, tan al borde de la caricatura, que no creo que… Bueno, lo estoy pensando y la verdad es que habelas, hainas [ríe]. Sí, conozco algunos casos, pero era algo más propio de otras épocas, cuando solo había una televisión y los presentadores eran casi dioses. Ahora es más difícil. Ahora somos todos currantes.
-En su anterior espectáculo, «Iba en serio», la crítica fue demoledora...
-Era obvio que iba a pasar. Había críticas escritas antes del estreno, que ninguneaban a Kitty Manver, que es una de las grandes de la escena de este país. Y eso me parece injusto. Pero por otro lado teníamos la respuesta del público, llenando los teatros noche tras noche.
-Pero sin embargo, en esta, están recibiendo unas críticas fantásticas.
-Es normal, porque la gente que está trabajando en el musical, tanto músicos como actores, son lo mejor que hay. Tenía muy claro que quería rodearme de lo mejor, porque aunque muchos vengan a ver al tío de la tele, como no les des un buen producto, no duras ni dos semanas en cartel.
-¿Hará más teatro?
-Sin duda. Esto me da energía para el resto de la semana. Es agotador, pero tan emocionante que compensa. Además, al ser música en directo me da un subidón antes de salir, al escuchar la banda… Y después ver a la gente llorar de la risa en la butaca, eso es impagable. Eso no te lo da la tele, que igual te está viendo alguien que no te soporta. Aquí se crea una corriente de cariño brutal.
-¿Se ve grabando un disco?
-No, no me veo. Me gusta mucho cantar en directo, pero lo de grabar un disco… ¡Quita, quita! Lo que me faltaba, meterme en eso también.