La plantilla de Nostián inicia reuniones con los partidos para intentar salvar la huelga
A CORUÑA CIUDAD
La planta cuenta con más de un centenar de trabajadores que tienen sus condiciones laborales en riesgo
14 feb 2019 . Actualizado a las 09:09 h.El comité de empresa de Albada, la empresa que gestiona la planta de reciclaje de Nostián, ha iniciado una ronda de contactos con los grupos políticos para intentar evitar un conflicto laboral en las instalaciones.
La planta cuenta con más de un centenar de trabajadores que tienen su condiciones laborales en riesgo, denuncian desde el comité de empresa, ya que el Ayuntamiento tiene pendiente renovar el contrato de gestión de la planta y el día 21 de este mes comienzan las negociaciones del convenio colectivo.
La inquietud de la plantilla se disparó a mediados del mes pasado, cuando el gobierno local publicó los pliegos del nuevo contrato. Esos documentos prevén que las básculas que pesan los camiones que acceden a la planta se gestionen mediante un contrato diferente, lo que supondría dividir a la plantilla actual. El comité se opone a ese planteamiento, y ya ha depositado un escrito en el Ayuntamiento para exigir que se mantenga la unidad del cuadro de personal. Están respaldados por una moción aprobada en el pleno de junio del 2018, cuando Marea, PP y PSOE instaron al gobierno, dirigido por el primero de esos tres partidos, a garantizar los derechos laborales de la plantilla y la seguridad en el desempeño de sus funciones.
El gobierno local se había comprometido a tratar los pliegos con la representación de los trabajadores, pero a pesar de que los hizo públicos a finales del mes pasado esa reunión no se ha producido y el plazo para modificarlos finaliza el próximo día 24. El comité tampoco cuenta por el momento con una fecha para que se celebre esa entrevista. Sí les ha contestado el PP, con cuya candidata, Beatriz Mato, se reunieron ayer; y el PSOE, con quienes se verán el viernes. Durante esas reuniones, los trabajadores han instado a los representantes políticos a actuar frente al gobierno local, ya que si el proceso de contratación continúa por el mismo camino consideran que será inevitable el inicio de movilizaciones e incluso de una huelga. El anterior paro, ocurrido en el 2013, fue el más largo de la historia reciente de la ciudad, estuvo salpicado de incidentes, y durante el mismo se produjo un incendio en la planta.