La jueza no aplica las medidas cautelares solicitadas por Tranvías y el precio del bus bajará desde mañana

E. Eiroa / X. Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Marcos Míguez

La titular del juzgado comunica al Ayuntamiento, 24 horas después de haber paralizado la implantación de las nuevas tarifas, que puede aplicarlas, a la espera de la resolución definitiva del litigio planteado por la empresa

01 feb 2019 . Actualizado a las 11:34 h.

Veinticuatro horas después de que la jueza del número 4 indicase al Ayuntamiento que no podía aplicar la rebaja de tarifas del bus que pretendía, el juzgado se ha vuelto a pronunciar indicando ahora que no aplicará las medidas cautelares que contra esa rebaja pretendía la Compañía de Tranvías. El miércoles la jueza demoraba la aplicación de la rebaja del bus para tener tiempo de estudiar el expediente y poder pronunciarse sobre las cautelares solicitadas por Tranvías. Un día después ha resuelto.

La empresa había recurrido al juzgado el cambio tarifario por considerarlo ilegal, ya que se aplicaba de modo unilateral y fuera del contrato que regula la concesión. El juzgado, con todo, entiende ahora que María Pita puede aplicar la reforma, sin entrar en la legalidad o no de la medida, que se dirimirá después en el procedimiento judicial correspondiente. Si la empresa logra finalmente que le den la razón, el Ayuntamiento deberá indemnizarla por el dinero que haya dejado de percibir.

Breve retraso

El gobierno local anunció el miércoles la rebaja, pero ese mismo día el juzgado le advirtió de que no podía hacerlo. Desde ayer tiene luz verde pues 24 horas después de frenar el anuncio municipal el Juzgado de lo Mercantil indicó que no imponía las medidas cautelares que pedía Tranvías en su denuncia, básicamente mantener las tarifas actuales hasta que se dirimiera el proceso.

En su auto el juzgado entiende que, en caso de que exista finalmente un perjuicio para los intereses de la empresa demostrado en una posterior sentencia, «los perjuicios económicos son fácilmente evaluables y por ello resarcibles», mientras que si el fallo final es el contrario y se da la razón al consistorio, no habría forma de indemnizar a los usuarios que no han podido disfrutar de la rebaja de precio fijada por el Ayuntamiento.

Los usuarios pagarán 1,20 euros por el billete ordinario, 0,75 con la tarjeta Millenium y 0,23 con el bono social. Los menores de 13 años viajarán gratis pero tendrán que sacarse la tarjeta, si no la tienen, para acreditar sus datos y entrar sin pagar. Los transbordos también serán gratuitos durante 45 minutos y en ese tiempo cualquiera se podrá subir al bus que quiera sin necesidad de pagar un nuevo billete. Los nuevos precios, salvo la gratuidad para los menores de 13 años, se aplicarán de modo automático sin que los usuarios tengan que hacer ningún cambio.

En el desencuentro entre Tranvías y el gobierno local, la firma, por su parte, inició los trámites para solicitar un aumento del precio del bus hasta 1,39 euros. Remitió ya el expediente a la Xunta, texto al que el Ayuntamiento ha presentado alegaciones que todavía no se han resuelto. Todo apunta a que el proceso judicial será largo pero mientras no se resuelve los usuarios pagarán diez céntimos de euro menos por el bus.

El concejal de Mobilidade, Daniel Díaz Grandío confirmó las tarifas, que también anuncia la empresa en su web. Grandío calificó de «histórica» la reducción, ya que con todos los anteriores gobiernos los precios subieron o, en los dos últimos años del mandato anterior, se congelaron.

Caso abierto

El concejal explicó que el proceso judicial sigue abierto, y que el pronunciamiento de la magistrada «só se circunscribe á medida cautelar». Subrayó que la rebaja pretende adaptar la concesión a las nuevas normativas europeas pero el edil no descartó que el juez dé la razón al final a la empresa y señaló que la solución pasaría por compensarle las pérdidas. Añadió que esos «prexuízos do interese privado» serán «facilmente evaluables e resarcibles». Según sus estimaciones, las pérdidas para la empresa ascenderán a 2,6 millones de euros anuales, pero aún así «ten garantida á súa estabilidade económica», dice, algo de lo que duda la compañía en su denuncia.

El BNG se manifestó ayer sobre la medida, lamentando que no haya reordenación de líneas ni carril bus y criticando que la rebaja sea una medida «tomada ás presas e pendente dunha decisión xudicial».