El tráfico se estabiliza en Alfonso Molina sin la ampliación a la vista
A CORUÑA CIUDAD
Las previsiones indican que aumentarán los vehículos, que ya no bajan con la AC-14
10 feb 2019 . Actualizado a las 19:47 h.Por Alfonso Molina el tráfico iba a bajar progresiva y sensiblemente tras la apertura de la tercera ronda. Esa era la teoría que manejaba el Ayuntamiento a principios del actual mandato para argumentar entonces que no era necesario ampliar la avenida. El tráfico, sin embargo, bajó en un primer momento pero ya ha dejado de hacerlo.
Según los datos de Fomento las cifras de intensidad media diaria (IMD) de vehículos en Alfonso Molina durante el año pasado ?a falta de computar diciembre? llegaban a 119.003 sumando turismos y transporte pesado. Es prácticamente el mismo guarismo que el registrado en el 2015, cuando la tercera ronda entró íntegramente en funcionamiento. Entonces fueron 119.800. Es decir, en tres años el tráfico se ha estabilizado en esa vía. En el 2014, por ejemplo, la IMD era de 127.000. Eso no significa que la tercera ronda haya retirado 8.000 vehículos de Alfonso Molina, realmente por la AC-14 pasaron el año pasado 28.804 coches, buses y camiones diarios. Lo que ocurrió es que tras la recuperación económica el tráfico ha subido.
El vial 18
Los estudios realizados para la redacción del proyecto del vial 18 inciden en sus proyecciones, además, en que el tráfico seguirá al alza mientras siga aumentando el PIB. El documento, que planea la construcción de ese vial entre la autopista y la tercera ronda precisamente para aliviar el acceso a la ciudad por Alfonso Molina, constata ya un aumento del tráfico en la AP-9 desde que se inició la recuperación económica. Además, considera que el tráfico seguirá creciendo a razón de un 2 % anual ?de media? en la autopista durante los próximos decenios. En el 2050, indican, circularán por allí un 70 % de vehículos que actualmente. De hecho, alertan de la necesidad de ampliar el último tramo de la AP-9 antes del 2031 para evitar problemas. El vial 18 podrá sacar en torno al 25 % de los coches que llegan por la vía que gestiona Audasa, pero con las proyecciones que se manejan ?incluyendo el ensanchamiento a tres carriles de la autopista? no será suficiente para aliviar la entrada principal de una ciudad que se colapsa con facilidad.
El doble en 20 años
El tráfico en la avenida no ha dejado de crecer desde su inauguración hace ya más de 60 años. Lo hizo progresivamente hasta que se disparó el volumen de vehículos en los 90.
Fomento conserva los datos históricos de aforos y las cifras de hace dos décadas contrastan notablemente con las actuales. En 1997 por la vía circulaban diariamente 61.582 vehículos, medidos a la altura de la gasolinera de Elviña. Por ese mismo punto pasaban 20 años después el doble.
El mayor volumen de tráfico en Alfonso Molina coincidió con los años del bum. El desarrollo económico hizo que entre el año 2002 y el 2009 la cifra se disparara por encima de los 140.000 vehículos diarios, alcanzando en ese último ejercicio los 155.000. Desde entonces hubo una contracción debida a la recesión económica, una disminución previa a la puesta en funcionamiento de la tercera ronda.
El número de coches seguirá creciendo al ritmo en que lo haga la economía
Los actuales estudios de Tráfico empleados para el vial 18 relacionan directamente la bonanza económica con el incremento del tráfico rodado, con porcentajes de incrementos de vehículos similares a los del PIB. Esa misma fórmula, empleada para medir aforos futuros en el vial 18, serviría también para proyectar nuevos aumentos en Alfonso Molina si la situación económica se mantiene.
Para dar cabida a todos esos coches hay un proyecto de ampliación aplazado año tras año por Fomento. En el proyecto de Presupuestos Generales del Estado tampoco figura ninguna cantidad para esa obra, parada por el gobierno local cuando parecía que se iba a ejecutar en el 2015 y de la que ahora, con otro Gobierno en Madrid nada se sabe. El tráfico ya no baja y amenaza con subir, pero la avenida sigue siendo la misma.
A Pasaxe
El retraso en la ampliación de Alfonso Molina no es el único que afecta a la ciudad. En el extremo de la avenida el puente de A Pasaxe acumula también demoras y también carece de fecha para el inicio de los trabajos que permitirán aumentar a ocho el número de carriles e instalar plataformas para peatones y bicicletas.
El proyecto del puente se licitó en el 2015 pero no se adjudicó hasta el verano del 2017. La empresa encargada de redactarlo obtuvo una prórroga y ahora ese documento está a consultas en Medio Ambiente, trámite que demorará todavía más la ejecución que, en todo caso, no tiene todavía los 25 millones de euros precisos asignados.