Los taxistas responden a las críticas: «Tenemos que mejorar, pero no a costa de que Cabify nos hunda»

A CORUÑA CIUDAD

CESAR QUIAN

El sector del taxi asume que tiene que actualizarse ante el auge de las nuevas plataformas

02 dic 2019 . Actualizado a las 18:56 h.

«Es muy duro estar toda la madrugada haciendo guardia mientras esperas una carrera y que los coches de Cabify te quiten el único cliente que te aparece», relata José Seijas. Este taxista lleva años trabajando en A Coruña. «Tenemos que actualizarnos y pasar un examen del Ayuntamiento cada cinco años. Debemos conocer todas las calles. Ellos tiran para adelante con el Google Maps», añade su compañero José Redondo. 

Son conscientes de que el auge de las nuevas plataformas como Uber o Cabify (en A Coruña desde mediados de diciembre) los empuja a renovarse. «Sí que hacemos autocrítica. Tenemos muchas cosas que mejorar, pero no a costa de que Cabify nos hunda», lanza tajante Francisco Rivera. La competencia solo será justa, mantiene el portavoz de la asociación Élite Taxi A Coruña, si es en igualdad de condiciones. «Los usuarios deben saber que cuando seleccionan un servicio con su móvil están haciendo daño a muchas familias. Pagamos impuestos, seguimos las normas y nos encontramos con otros conductores que no lo hacen y pueden hacer ofertas o rebajas según les vaya el día. Nosotros tenemos unas tarifas mínimas fijadas por normas autonómicas y municipales, como la bajada de bandera», añade Redondo. 

Mil familias afectadas

En A Coruña hay unas 500 licencias de taxi concedidas y 400 conductores en activo. «En total hablamos de unas mil familias que viven de este sector. Un servicio público que no recibe subvenciones como otros transportes como los autobuses urbanos», apunta Redondo. Las licencias de las VTC (vehículos de turismo con conductor) como las que usan Uber o Cabify son más antiguas que estas plataformas. «En A Coruña hay cuatro empresas de VTC operando desde hace años. Nunca fueron un problema porque siempre siguieron la normativa. Cabify no lo está haciendo. Sale a la calle a captar clientes y sus conductores aparcan cerca de zonas calientes, donde saben que va a haber público. El reglamento los obliga a estar estacionados en su garaje y salir cuando tienen precontratado por la aplicación un servicio», aclara Francisco Rivera, vicepresidente además de Élite Taxi en A Coruña. 

«Hacemos jornadas de hasta 12 horas al día, no porque quiera, es que si no llego a fin de mes. A mi mujer casi le tengo que mandar una foto para que me pueda ver la cara. Yo también soy crítico con los taxistas, tenemos que cambiar muchas cosas, pero la gente tiene que comprender todas las obligaciones a las que estamos obligados por ley y a las que aplicaciones como Cabify no están atados», zanja Juan, otro taxista.