El pleno de los 15 millones para la banca y los 21 en pagos irregulares

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

El gobierno local lleva la cuenta general del 2017 a pleno con dos meses de retraso

26 dic 2018 . Actualizado a las 11:48 h.

Aunque haya sido convocado de forma extraordinaria y urgente, el último pleno del año, que se reunirá hoy a las 10 de la mañana, solo servirá para concluir asuntos iniciados en el 2017 y en su mayor parte de trámite, aunque de gran importancia para las arcas de la hacienda municipal.

Por una parte, el pleno dará el visto bueno a la cuenta general del año pasado. Ese documento recoge toda la gestión económica del Ayuntamiento durante el 2017. El gobierno local ha incumplido durante cuatro años seguidos los plazos para tramitarla, aunque en esta ocasión los retrasos han sido mayores que en los tres ejercicios anteriores. De hecho, el trámite de hoy tenía como fecha tope el 31 de octubre.

Dentro de la cuenta general se incluye el informe de la Intervención municipal sobre las facturas irregulares del 2017, que fueron bloqueadas por los servicios municipales y solo pudieron ser pagadas por orden del alcalde.

En la cuenta general del pasado año se alcanzó una cifra sin precedentes de pagos que no se ajustaban a la normativa: 459 facturas que suman 20,8 millones de euros, un 44 % más que en el 2016, cuando se liquidaron por esa vía 14,5 millones de euros. La cifra contrasta todavía más con la del 2015, cuando se abonaron 5 millones en recibos irregulares. En dos años el gobierno local ha multiplicado por cuatro los pagos que no cumplen la normativa.

Esos datos han provocado críticas unánimes de la oposición. El PP lo ha calificado de «récord escandaloso» y ha denunciado que al alcalde «solo le preocupa que los firmantes de la Marea tengan sus contratos adjudicados y pagados lo antes posible». Por su parte, tanto el PSOE como el BNG han acusado al gobierno local de incapacidad para gestionar los recursos públicos.

La mayor parte de las facturas irregulares derivan de servicios que se prestan sin contrato regulador. Los populares están seguros de que la cifra aumentará el próximo año, ya que en este ejercicio se están prestando sin contrato los dos mayores servicios municipales: la limpieza viaria y la recogida de basuras, que suman 20 millones anuales.

Las críticas de la oposición también se dispararon a raíz del tercer asunto que va al pleno de hoy: la pérdida de 15,1 millones de euros para inversiones, que tendrán que ser utilizados en liquidar deuda con la banca porque el gobierno local no ha cumplido el período de pago a proveedores durante ocho meses seguidos.

Con esos 15,1 millones se iban a financiar 85 obras de todo tipo en los barrios de la ciudad. Ahora será preciso financiarlas por otra vía, y las mejoras se retrasarán, ya que no hay partidas presupuestarias vigentes para ejecutarlas.

La pérdida de los 15,1 millones para inversiones también hunde sus raíces en la gestión económica del 2017. Esos fondos son remanente del año pasado. Es decir, dinero que estaba incluido en el presupuesto y que el gobierno local podría haber utilizado sin necesidad de vigilar el pago a proveedores. Pero en todo el 2017, el Ayuntamiento no logró hacer esas inversiones -las cifras de ejecución presupuestaria de ese año y el 2016 son de las más bajas de la década- y los fondos quedaron como un remanente que podría utilizarse ahora si se cumplían unas condiciones. Al contrario que en ayuntamientos como Vigo o Lugo, el gobierno local no ha logrado cumplirlas.

Atropellado fin de año económico con unos presupuestos del 2019 que aún están en pañales

Al pleno de hoy se sumará, esta misma semana, otra decisión clave para la gestión financiera del Ayuntamiento. En los próximos días, probablemente en la junta de gobierno del viernes, el equipo de Xulio Ferreiro tendrá que aprobar la prórroga de los presupuestos de este año, ya que no se han aprobado las cuentas del 2019. Así, por cuarto ejercicio consecutivo, el Ayuntamiento de A Coruña arrancará el año sin su principal documento económico.

Esa circunstancia volverá a dificultar la ejecución de obras y otras inversiones, ya que la ley impide prorrogar las de los ejercicios previos, y la prestación de ayudas a entidades culturales, deportivas y sociales de la ciudad.

Por el momento se desconoce cuándo tiene previsto llevar el gobierno local los presupuestos a pleno, de hecho ni siquiera se han puesto sobre la mesa los datos básicos del documento, como el gasto previsto en inversiones o los fondos totales que prevé tener disponible el Ayuntamiento.

Los cuatro años de prorrogas presupuestarias no tienen precedente en A Coruña, ya que desde principios de los 80 las cuentas siempre se aprobaron en fecha. La situación de María Pita también contrasta con otras ciudades con gobiernos en minoría. El caso de Pontevedra, donde gobierna el BNG, salió varias veces en el pleno coruñés. Hace dos meses, el equipo de Ferreiro aseguró, en una respuesta al Bloque, que iban más adelantados que en esa ciudad. Finalmente, las cuentas de Pontevedra se aprobaron el pasado día 14, mientras en A Coruña siguen sin tener fecha.