Amor y emociones sin barreras en el estreno como autora de María Inés Cuadrado

Xesús Fraga
xesús fraga REDACCIÓN / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

La actriz argentina afincada en Galicia María Inés Cuadrado firma el álbum «El increíble viaje de los besos voladores», ilustrado por Aldara Prado

24 dic 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

«Hay muchas clases de besos... tantos como colores tiene el amanecer». De esta forma, con esta reafirmación sencilla pero sutil de la diversidad, también amorosa, empieza El increíble viaje de los besos voladores (Lumen), con el que la actriz y narradora oral argentina afincada en Galicia María Inés Cuadrado (Buenos Aires, 1963) se estrena como autora publicada en el terreno de los álbumes, obra que ha sido ilustrada por Aldara Prado (A Coruña, 1992). Por sus páginas desfilan besos enamorados, los de nariz de los inuits, los ruidosos y los silenciosos, incluso aquellos que ni llegan a rozar a sus destinatarios. «¿Serán besos con miedo?», se pregunta la autora. «Los besos, como cualquier otro gesto, son capaces de transmitir lo más sutil de nosotros mismos», explica María Inés Cuadrado. «Si pudiésemos ser capaces de decodificar estas señales, la comunicación sería más limpia y efectiva, con menos interferencias», añade.

De todas esas clases de besos, los que adquieren la condición de estrella en este libro son los voladores, guiados por el azar pero también la generosidad de quien los lanza. «En el mundo de hoy, con guerras, xenofobia, hambre, sometimiento, vejaciones, pensar que existe el efecto dominó me reconforta algo. Pensar que si doy algo de amor al universo alguien lo recibirá me parece importante. No es cuestión de constatar cuánto de cierto hay en este hecho, sino de generar una corriente desinteresada, como cadena de favores, cadena de cariño. Lo que llamo amor sostenible», explica la autora.

María Inés Cuadrado también ha investigado el cuento como herramienta terapéutica y la relación entre arte y salud, un vínculo que ella sitúa en el cuerpo, «el territorio donde tienen lugar las emociones». «Como una guitarra, resuenan en él todo lo que pensamos y sentimos por medio de palabras. La creatividad estimula la liberación de emociones bloqueadas a partir de historias que nos permitan recuperarnos y reconstruirnos hacia la salud, dejando de lado al dolor. En este sentido, nuestro Increíble viaje de los besos voladores es una historia reparadora, que invita a seguir contando para crear mundos mejores», describe.

Metáforas

La responsable de concretar en imágenes esas aventuras de los besos voladores es Aldara Prado, a quien la emoción, metáforas y sentidos con los que la actriz manejó las palabras le facilitó la tarea. «Para calquera ilustrador o traballo está feito: as imaxes xorden soas na cabeza que as lea». Lo que sí tuvo clara la ilustradora es que la idea esencial era la diversidad del amor, reflejada en la variedad de besos. «Quixen representar persoas de todo tipo de xénero ou sexualidade, familias con diferentes esquemas, intentando en todo momento manterme afastada do arquetipo familiar mai-pai-fillo-filla-can/gato do que tan saturado está a literatura infantil», explica. «Vivimos nun mundo diverso e que ama sen prexuízos, e iso debemos velo reflectido nos libros para cativos. Agardo que calquera persoa que o lea se sinta representada nel!».

La ilustradora ha reflejado en el álbum sus referentes pictóricos, como los impresionistas franceses -«a síntese e a representación da cor aprendina deles»-, la cartelería norteamericana de los años sesenta o animadores actuales, especialmente japoneses. Ahora mismo trabaja en Nimue, una novela gráfica ambientada libremente en el mundo artúrico, y que saldrá el año próximo en el mercado francobelga de la mano de Casterman. «Faríame moita ilusión que puidese ser publicado en galego», reconoce.

De momento, ya hay programadas dos presentaciones: en Betanzos el día 27 (Biblos, 18.00 horas) y en A Coruña el día 29 (Santos Ochoa (12.00 horas).