En el interior del bar Santa Comba no había clientes y su propietaria estaba fuera, por lo que no hubo que lamentar daños personales
04 dic 2018 . Actualizado a las 17:40 h.La propietaria del restaurante Santa Comba, situado en el número 115 de la calle Orzán, y los vecinos del inmueble se han llevado un buen susto minutos antes de las 10 de la mañana al desprenderse una gran parte del falso techo del local. En el momento del derrumbe no había nadie en el interior del local por lo que solo ha habido que lamentar daños materiales.
La dueña del establecimiento, un clásico de la comida casera que abrió sus puertas en 1977, se encontraba a la puerta del local para mover una de las mesas del mobiliario cuando cedió el falso techo. El desplome provocó un reguero de escombros en el interior del establecimiento.
Los bomberos estuvieron trabajando en el lugar para proceder a la retirada de los escombros, asegurar la zona y comprobar que el edificio no tiene ningún daño estructural. Los vecinos del piso superior fueron desalojados por precaución para poder comprobar, antes de que regresasen, si el suelo de su vivienda está asentado y no entrañaba ningún tipo de peligro. «Escuchamos un ruido como si cayese una pared y bajamos a ver qué sucedía. Los bomberos nos dijeron que no volvamos a subir mientras no comprueben si todo está bien», comentó uno de los vecinos en el programa Voces de A Coruña de Radio Voz.