La ausencia de mantenimiento resucita un punto negro en Os Castros

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

veronica vazquez vazquez

Las líneas continuas que evitaban peligrosos trenzados han desaparecido a la salida del túnel, una zona muy conflictiva

26 nov 2018 . Actualizado a las 17:50 h.

La construcción del falso túnel de Os Castros permitió, hace casi dos décadas mejorar la salida y entrada de la ciudad por la Avenida da Pasaxe, convirtiéndola en una vía más fluida y por la que circulan cada día más de 80.000 vehículos. El problema de esa carretera, tal y como se diseñó originalmente, estaba en las salidas e incorporaciones que al final del túnel permitían entrar y abandonar Os Castros.

Tras muchos accidentes Fomento decidió variar las normas e impedir la salida, a la altura de la boca del túnel, hacia el barrio, cerrando ese paso con barreras de hormigón tipo New Jersey. En el lado opuesto Tráfico pintó una línea continua que impedía a los coches que querían incorporarse a la avenida hacerlo en ese punto.

Esas líneas han desaparecido a causa de la falta de mantenimiento en esa zona. Los vecinos del barrio alertan de la peligrosidad de ese punto, en el que muchos coches, ante la ausencia de señalización vertical, se vuelven a cruzar en un peligroso trenzado. De hecho, aún con la línea pintada, en el lugar se repitieron los accidentes a causa de quienes no cumplían las normas. Cuando un coche sale del falso túnel a una velocidad elevada y se encuentra con otro que se incorpora lentamente, no es infrecuente que la situación desemboque en un accidente.

La falta de mantenimiento que ha resucitado el punto negro de Os Castros no afecta solo a esas líneas. La rotonda de Casablanca, donde cada día se cruzan miles de vehículos, incluyendo tráfico pesado hacia el puerto, también padece de una evidente falta de cuidados. Allí la pintura también se encuentra medio borrada, las malas hierbas asoman por las aceras y llegan, en ocasiones, hasta el asfalto, donde también hay zonas de sombra donde se puede ver verdín. El asfalto, con múltiples reparaciones, también está lleno de baches y costurones que dificultan la conducción, sobre todo para vehículos de dos ruedas. Fomento no ha aclarado cuándo pretende realizar las obras necesarias para reinstalar las condiciones de seguridad de ese punto.

Las Ánimas

La falta de mantenimiento no es algo exclusivo de la Avenida da Pasaxe y sus incorporaciones. En la ciudad también hay zonas que llevan esperando años algún tipo de actuación. Entre las más destacadas figura el paseo de la Dársena, cuyo firme sigue en el estado en el que estaba cuando se acabaron las obras del túnel. Lo mismo ocurre en la rotonda de las Ánimas, mal conservada y con mala señalización.