Ferreiro no da por seguro que se recupere el dinero de la compra irregular de pisos

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

EDUARDO PEREZ

«Non digo que esté garantido, digo que imos iniciar ese procedemento», explicó el alcalde a preguntas de los periodistas

20 sep 2018 . Actualizado a las 19:10 h.

El alcalde de A Coruña no da por seguro que se recuperen los 145.865 euros que el Ayuntamiento pagó a un afín de la Marea por los dos pisos cuya compra ha sido anulada por el Consello Consultivo. A preguntas de los periodistas, Xulio Ferreiro afirmó: «Non digo que esté garantido [el reintegro del dinero], digo que imos iniciar ese procedemento». El regidor también reiteró que no ve motivos para que dimitan los dos concejales implicados en el proceso, los responsables de Rexeneración Urbana, Xiao Varela, y Contratación, Alberto Lema, a pesar de que el pleno de A Coruña exigió ayer por 17 votos a 10 que el alcalde les retire las competencias. Toda la oposición, PP, PSOE y BNG, reclamó el cese de los concejales, que por ahora han hecho oídos sordos pese a que solo contaron con el respaldo de su grupo en un pleno marcado por la falta de explicaciones sobre las irregularidades por parte del gobierno.

La Marea

Errores y ventilador. Fue Xiao Varela quien defendió la postura del gobierno local. En su primera intervención, cuando ya se sabía que toda la oposición exigiría su cese, atribuyó las irregularidades del concurso a una «cadea de erros humanos», que hasta ahora atribuyen a los funcionarios, y elogió la «calidade humana» del alcalde por haber pedido «perdón» por esos problemas. En su segundo turno, «puxo o ventilador» como vaticinó gráficamente la portavoz del BNG, Avia Veira, y enumeró el consabido listado de casos de corrupción del PP, reprochó al PSOE escándalos locales como Someso o el Conde de Fenosa, e incluso criticó la política de vivienda del bipartito de los socialistas y el Bloque; pese a que fue colaborador del por entonces edil de Rehabilitación, el nacionalista Mario López Rico.

 En su afán de buscar en el pasado, incluso exigió al PSOE que pidiese perdón por unas declaraciones del 2013 de su excandidata, Mar Barcón, o recordó que el exportavoz del PP, Julio Flores, no se disculpó por la Pokémon. Ambos han dejado la política. Varela comparó esas actuaciones con la suya, pero dando a entender que no seguirá sus pasos.

El caso

Dudas sin resolver. Entre los asuntos que removió «el ventilador» del responsable de Rexeneración Urbana no estaban las explicaciones a las irregularidades del concurso, ni la respuesta a las preguntas de la oposición. Entre ellas, por qué firmaron las resoluciones previas a la compra de los pisos sin hacerlas públicas, y por qué no esperaron a que pasasen los 30 días para recurrirlas antes de hacer las compras.

Esas son solo parte de las dudas de un escándalo larvado desde enero, cuando se conocieron las posibles irregularidades, pero que estalló esta semana cuando el Consello Consultivo anuló la compra de los dos pisos, que fueron ofertados por un firmante e impulsor de la Marea, además de colaborador del gobierno de Ada Colau en Barcelona, Toni Lodeiro Zas, que cobró 145.865 euros por ellos. El alcalde aseguró que solo es una «coincidencia subxectiva». Pero tanto el PP como el PSOE denuncian trato de favor.

El PP

Acusaciones de corrupción. La portavoz de los populares, Rosa Gallego, acusó al gobierno local de poner «los intereses de su amigo por encima de los intereses de la ciudad». Recordó que durante meses el equipo de Xulio Ferreiro negó las irregularidades, y acusó a la oposición y la prensa de inventar esos problemas para desgastar al gobierno; y recordó que el ejecutivo local pretendía enviar al Consello Consultivo solo uno de los pisos, el de menor valor económico, pero que la oposición, en un pleno también convocado a instancias del PP, les obligó a llevar los dos.

Gallego fue especialmente crítica con el alcalde, Xulio Ferreiro al que acusó de «mentir a sabiendas» y al que reprochó las críticas del Consultivo por la redacción de informes de asesoría jurídica «ex post y ad hoc» -a posteriori y a medida- para «salvar el piso más caro de su colega».

El PSOE

Amiguismo y nepotismo. Xiao Varela insistió en que el Consultivo no dice que haya trato de favor. El socialista José Manuel Dapena negó la mayor. Recordó que según esa institución se vulneró la libre concurrencia, e invitó al edil de la Marea a buscar en el diccionario: «Si no hay libre concurrencia lo que hay es amiguismo o nepotismo», le espetó.

 Dapena, como antes Gallego, recordó que el director de área de Urbanismo, Hipólito Pérez Novo, es «conmilitón» de Toni Lodeiro y del propio Varela, ya que compagina su cargo con el de portavoz de la Marea de Betanzos. Recordó además que, en una comisión, Pérez Novo afirmó que en uno de los pisos vendidos por el firmante, que es un local comercial, hubo personas empadronadas. Ese dato, señaló Dapena, no figuraba en ningún expediente. Por eso preguntó en dos ocasiones si Lodeiro se había entrevistado con algún miembro del gobierno local. Varela no le contestó en ningún momento.

El BNG

Por no estar a la altura. Avia Veira lamentó desde el primer momento tener que estar «nesta melee» junto al PP, pero dejó claro que pediría la dimisión de los dos ediles de la Marea. Recordó que la habían pedido de concejales populares «dos que nada esperabamos», por lo que con más motivo las exigirían ahora a quienes venían «a mudalo todo», como abanderados de la «rexeneración». Veira les exigió que «abandonen o victimismo» porque «ninguén é máis duro con vostedes do que vostedes foron cos demais», y les reprochó que «no momento no que hai que dar a cara poñan o ventilador».

 Después de hacer casi una vivisección de los incumplimientos electorales de la Marea en materia de vivienda, Veira preguntó a los concejales si había revisado el concurso, si no saben que «47 metros non son 50», en referencia a que las propiedades no cumplían con la superficie mínima. Tras calificar de «moi graves» esos hechos y que no se respetase la libre concurrencia, anunció que apoyarían la petición de que fuesen cesados.

El alcalde niega el saludo al socialista José Manuel Dapena

Cuando terminó la sesión, el alcalde rechazó con gestos ostensibles dar la mano al socialista José Manuel Dapena. Ferreiro, fuera de turno y visiblemente crispado, le había contestado un brusco «no» cuando Dapena preguntó si alguien de su gobierno se había entrevistado con Lodeiro tras conocerse el caso.

Durante la sesión, Dapena recordó a Ferreiro que había dicho de él que parecía «mentira» que fuese abogado cuando denunció irregularidades. «Visto lo visto», dijo el socialista en referencia al dictamen del Consultivo, ahora podrían ser los ciudadanos los que duden de que el regidor es profesor de Derecho.