El pleno pasa factura política por los pisos

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

La corporación se reúne de forma extraordinaria para debatir las responsabilidades del caso

19 sep 2018 . Actualizado a las 17:30 h.

El pleno de A Coruña se reunirá hoy a las 17.30 horas de forma extraordinaria para debatir el alcance de las responsabilidades por el caso de la compra de pisos.

El contexto

Una operación irregular. El escándalo deriva de la adquisición por el Ayuntamiento de dos propiedades de un firmante de la Marea Atlántica. Los dos inmuebles fueron seleccionados por concurso público, pero no cumplían con las condiciones mínimas de la convocatoria, que estuvo marcada por distintas irregularidades. Esas anomalías llevaron al Consello Consultivo a dictaminar que el Ayuntamiento debe anular las compras, lo que supone recuperar el dinero, 145.865 euros, y devolver al firmante de la Marea las dos propiedades: una oficina en la calle Joaquín Martín Martínez y un apartamento en la calle Santander.

  

El vendedor y firmante. El ofertante de las dos propiedades es Toni Lodeiro Zas, un rubricante del manifiesto de la Marea al que ese partido agradeció en la Red su colaboración para poner en marcha la Marea de Fóra, que agrupa a simpatizantes del partido que no residen en A Coruña.

 Lodeiro entró a trabajar en el 2015 como consultor en materia de consumo responsable para el gobierno local de Ada Colau en Barcelona. En abril del 2016, ayudó a organizar y coordinar unas jornadas sobre comercio local y consumo que organizó la concejalía que gestiona Alberto Lema. Tuvieron un coste de 3.872 euros.

Ese mismo mes, Lodeiro participó en las jornadas Das prazas ás institucións, que organizó la Marea de Pontevedra y que contaron con «líderes sociais e representantes das mareas, En Marea e Podemos» como Íñigo Errejón, Xulio Ferreiro o la concejala Claudia Delso, entre otros.

  

Las propiedades. El piso de la calle Santander costó 91.290 euros. Según toda la documentación excepto el estudio de la tasadora mide 49,55 metros cuadrados, por lo que no llega a mínimo de 50 metros que requería el concurso. Carece de las dos ventanas a la calle que decían las bases.

 El ático de la calle Joaquín Martín Martínez también incumple la superficie mínima, ya que según la documentación tiene 47,2 metros. Ninguna de sus habitaciones llega a los 8 metros requeridos. Aunque el concurso pretendía comprar viviendas para uso social, es un local comercial con uso de vivienda ilegal. Pese a ello fue tasado como vivienda regular a petición del Ayuntamiento, y el gobierno local pensaba pagar su legalización con fondos públicos. No será posible porque su techo es tan bajo que no cumple las normas de habitabilidad.

 Los implicados. La semana pasada, al conocerse que el Consello Consultivo había anulado las compras, dimitió la jefa de servicio de Rehabilitación e Vivenda, que presidió la comisión que valoró las ofertas. Pero la oposición exige responsabilidades políticas y, concretamente, la dimisión de Xiao Varela y Alberto Lema.

El primero, como concejal de Rexeneración Urbana, firmó la resolución que dio el visto bueno al concurso público. El segundo firmó las resoluciones de compraventa de los pisos. Esos trámites se llevaron a cabo pese a las citadas irregularidades y no se hicieron públicos, ni en la web municipal ni en los boletines oficiales. Además, las compraventas se firmaron cuando solo habían transcurrido dos de los 30 días en los que era posible recurrir las resoluciones previas.

La sesión plenaria

Solo la Marea cree que llega. El alcalde, el gobierno local y la Marea Atlántica sostienen que los problemas del concurso derivan de «erros técnicos» que atribuyen en exclusiva a los funcionarios. Por ese motivo han rechazado en reiteradas ocasiones que los concejales vayan a dimitir.

El PP, que forzó la convocatoria del pleno de hoy, defenderá que el alcalde debe retirarles todas las competencias y les ha exigido la dimisión. También el PSOE ha reclamado que ambos concejales dejen sus puestos. El BNG hasta ahora ha reclamado responsabilidades acordes con el discurso de limpieza política total que la Marea encabezó en las elecciones municipales del 2015.

Los precedentes

Tres comisiones y un pleno. A juzgar por los antecedentes, la Marea tendrá difícil evitar que la sesión concluya con una petición de dimisión contra sus ediles. La polémica de los pisos ya había ido una vez a pleno, también a instancias del PP, para que el gobierno local enviase la posible anulación de los dos pisos del firmante al Consello Consultivo. El partido de Ferreiro intentó que solo fuese uno, el de la calle Joaquín Martín Martínez, pero el pleno decidió que fuesen ambos al considerar las dos compras irregulares. Tenía razón.

Además, la corporación ha celebrado tres comisiones para investigar lo sucedido en el concurso de compra de viviendas. En la última de ellas, del área de Transparencia y también convocada por el grupo del PP, solo la Marea no votó a favor de un dictamen en el que se detallaban 17 posibles irregularidades en la adquisición de los inmuebles.