Indignación entre los comerciantes del centro, resignados a limpiar las pintadas

iago teijeiro / a. a. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

Nuria Cancela

El Ayuntamiento afirma que solo eliminará grafitis de los espacios públicos

01 oct 2018 . Actualizado a las 12:52 h.

Numerosos comerciantes de la calle Real y de Riego de Agua, en la milla de oro de la ciudad, se sienten abandonados por el Ayuntamiento y hastiados por las pintadas que semana tras semana aparecen en las fachadas, ventanas y rejas de sus locales. Este no es un problema reciente, llevan años sufriéndolo sin que nadie les dé una solución, y muchos denuncian un aumento en los últimos meses. La mayoría han tenido que contratar un servicio especial para limpiar los garabatos de los cristaleras y el mármol o han pintado ellos mismos por encima para taparlos. Es la solución provisional que ha tomado Alejandro Conde, propietario de la cafetería Granier, en el número 18 de la calle Real. «Tuvimos que contratar a un hombre para que viniera a limpiar por la noche, y eso de 150 euros no baja», comenta resignado y reconoce que «se te quitan las ganas de intentar tener esto bien». Afirma que se ha puesto en contacto con la Policía Local, aunque no le han ofrecido una solución. «Nos dicen que tienen a una serie de grupos identificados, pero nada más», afirma. Alejandro tenía la esperanza de que con la iniciativa del gobierno local A Pé de Barrio le eliminarían algunas de las pintadas, pero «aún estamos esperando», añade.

Al pasar el Teatro Rosalía, ya en la calle Riego de Agua, la presencia de grafitis continúa. Paula Bujía, de la tienda de moda A&M Rancaño, también lamenta cómo está la situación de la zona. «Cuando fue lo de A Insumisa nos hicieron pintadas, pero no lo padecemos tanto como en la calle Real», afirma. Se queja de que en todo el centro la situación es «una locura». «Estos son garabatos. Te fastidian la fachada y las puertas y tienes que estar limpiándolo tú. Es un fastidio», se resigna. Paula apunta a la presencia de locales cerrados y abandonados como posible reclamo para los vándalos: «En Riego de Agua no, pero en la calle Real hay bastantes».

Nuria Cancela

El Ayuntamiento alega que solo le compete la retirada de pintadas en el espacio público y en edificios de la Administración. Sin embargo, en la primera quincena de julio sí que retiraron grafitis en contra de la Marea en viviendas particulares de la Ciudad Vieja. Lo recuerda el dueño de la farmacia del número 3 de la calle Real. «Hubo una época en la que se limpiaba y no pintaban tanto, pero desde que abrieron la mano y fueron más permisivos, esto está hecho un asco. Las suyas bien que las quitan», comenta enfadado el dueño mientras señala las marcas de grafitis que intentó limpiar. «Esto es un desastre, y la Policía no nos da ninguna respuesta», recalca, y llega a reconocer que en varias ocasiones le contestaron con un «límpielo usted». «Lo que tiene que haber es más vigilancia y más patrulla», termina.

Carmen, una vecina que frecuenta la calle San Nicolás, también está harta y achaca el problema al desalojo de A Insumisa. «Xa estaba mal antes, pero dende que pasou aquilo, isto empeorou moitísimo. Borran e ao día seguinte volve estar pintado. A Coruña é unha fermosa cidade e con isto estamos quedando na cola do cabalo», sentencia.