La organización del festival y el gobierno local atribuyen a una decisión artística que el concierto durase 70 minutos
14 ago 2018 . Actualizado a las 11:01 h.Muchas de las 30.000 personas que fueron a ver a The Pretenders el sábado a Riazor se llevaron un chasco. En las redes sociales hubo quejas por «problemas de sonido», más o menos habituales todos los años, o la «frialdad» del grupo angloamericano, pero la mayoría elogiaron la actitud y desempeño musical de un veterano y muy reputado conjunto de rock. El problema fue la duración: unos 70 minutos de concierto.
Para muchos asistentes, que esa misma noche protestaron en las redes sociales, fue demasiado corto, y algunos recordaron el gasto que hizo el Ayuntamiento para traerles a la ciudad. Pagó 196.988 euros solo de caché. La música salió a más de 2.800 euros por minuto.
La duración del recital
La normal en festivales. La organización del Noroeste atribuyó ayer al criterio del artista la duración del concierto, y rechazó que se hubiese producido alguna incidencia que obligase a reducir su duración. Las mismas fuentes señalaron que el número de canciones que interpretaron es habitual para el grupo. En la misma línea, el Ayuntamiento señaló que el concierto «axustouse ao set [listado aproximado de canciones] de festival da banda». Lo mismo señalan fuentes del sector, que insisten en que el número de temas es el habitual para sus actuaciones en festivales. En Riazor, The Pretenders interpretaron 16 canciones. Según la página web especializada, setlist.fm, la media en sus conciertos es 17. En la misma web se detalla el listado de canciones de numerosos festivales y en muchos de ellos figuran 15 o 16. Que no hiciesen bises, algo también criticado en las redes, también parece habitual. Las citadas fuentes del sector dicen que no suelen hacerlos -como muchos otros grupos anglosajones-. Según los datos de la mencionada página web, solo los cantan en un tercio de los conciertos que dan.
Muchos de los críticos habían asistido a su concierto en Vigo en julio del 2017, en el que tocaron 22 canciones durante casi dos horas. Pero, según la organización, las circunstancias de ambos conciertos son distintas. El de Vigo empezó a las 23.00 y The Pretenders tenían toda la noche por delante. Este, pasadas las 23.45 y como colofón a un festival con más de 80 actuaciones.
El coste del concierto
Aviones y prisas. El caché del concierto fue de 196.988 euros, lo que multiplica por dos el del citado concierto de Vigo. En el 2017, el grupo estaba de gira por España. Este año también están en ruta, pero por el Reino Unido. El día anterior al Noroeste tocaron en Mánchester y vinieron específicamente a la ciudad para el festival. Fue preciso fletar un avión para traer al grupo y el equipo hasta A Coruña y luego devolverlos al Reino Unido, donde seguirán actuando los próximos días. La contratación tuvo que hacerse a toda prisa. Los trámites se concretaron el 12 de julio, cuando el consejo rector del Instituto Municipal Coruña Espectáculos (IMCE) aprobó el acuerdo para traer al grupo. Faltaba menos de un mes para el concierto.
Esas prisas y las dificultades para encajarlo en la agenda del grupo repercutieron en el precio -ha sido el Noroeste más caro al menos desde el 2014-, señalan las fuentes mencionadas, que insisten en la volatilidad del precio de las actuaciones cuando se trata de grupos internacionales. La decisión del Ayuntamiento de traer a The Pretenders, pese a la dificultades y al elevado coste, entroncaría con la apuesta que el gobierno local hizo este año, marcado por las movilizaciones feministas, por dar una especial relevancia a las mujeres en el festival. Así, la piedra de toque del Noroeste debía ser un grupo con una frontwoman, un papel en el que encajaban la reivindicativa Chrissie Hynde y su banda.