Defensa continúa con el proceso de venta de su suelo en la Maestranza

Eduardo Eiroa Millares
E. Eiroa A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

PACO RODRÍGUEZ

El ministerio no tiene instrucciones de anular la operación, como pide el alcalde

29 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.

Las cartas remitidas por el alcalde, Xulio Ferreiro, a la nueva ministra de Defensa, Margarita Robles, y al secretario de Estado de Defensa hasta el momento no ha dado el resultado apetecido por María Pita. Tras más de dos años de trámites y dos subastas sin ofertas concretas por parte del ayuntamiento más allá de pedir la cesión gratuita, el ministerio encontró un comprador, por 11,8 millones para dos de sus parcelas en la Maestranza. El proceso de venta directa comenzó a principios de este mes, tras quedar desiertas las subastas. Las dos parcelas se ofrecían a través de la web del departamento de Defensa encargado de la gestión del patrimonio sin uso militar, una suerte de portal inmobiliario en el que cualquier interesado puede adquirir los bienes.

Defensa encontró al fin su comprador, y cuando se confirmó la operación el Ayuntamiento pidió que se anulara, pues su intención era que ese suelo acabara en manos municipales. Además de la epístola a Robles, Ferreiro se puso también con el delegado del Gobierno, Javier Losada, para transmitirle su interés en paralizar la venta. El lunes pasado reiteró la petición de que la venta se desista del proceso de enajenación y se cedan gratis al concello.

Este semana el ministerio confirmaba que no se ha recibido ninguna instrucción en ese sentido y apuntaba que «el proceso sigue su curso». Los trámites para cerrar la compra pueden durar entre cuatro y ocho meses, según indica Defensa.

El cliente ya abonó un depósito de 590.000 euros por unas fincas en las que se pueden levantar hasta 176 pisos. Según el ministerio, antes de llegar al notario faltaría un informe de la asesoría jurídica comprobando que se cumplen los requisitos legales, una resolución del gerente del Invied -el organismo que gestiona el patrimonio de Defensa-, otro informe de la Intervención General del Estado -preceptivo para propiedades de más de un millón de euros-, un acuerdo del secretario de Estado de Defensa autorizando la enajenación y finalmente la resolución del gerente del Invied sobre la adjudicación definitiva. En total, un periplo burocrático que dura entre cuatro y ocho meses y que hasta ahora nadie ha ordenado detener.

La operación inmobiliaria no es nueva, se gestó en 1984 a raíz de un acuerdo con el consistorio por el que este se quedaba determinados terrenos ya sin uso militar y permitía al Estado vender otros con los que sufragar los gastos ministeriales.

De hecho, es habitual que Defensa venda propiedades que ya no utiliza. Actualmente tiene un inmueble a disposición de quien quiera comprarlo cerca de la estación de ferrocarril y recientemente adjudicó, por cerca de 1,5 millones de euros, un solar de 373 metros cuadrados edificable en la calle Adelaida Muro. En esos casos María Pita no puso ningún problema.

En la Maestranza la Marea pretendía la cesión gratuita de esas propiedades al consistorio. En los últimos días Ferreiro sugirió la posibilidad de adquirirlos -sin dar cifras- aunque esa oferta la hizo después de iniciada la compra, no antes.

Defensa trató de subastar ese suelo dos veces, la primera de ellas con una fuerte oposición por parte de la Marea, la segunda -tras la cesión gratuita al Ayuntamiento de la Comandancia de Obras- sin apenas críticas.

El convenio del 84 | Un acuerdo para ceder terrenos a cambio de poder subastar solares sin uso militar

En A Coruña abundaban a finales del siglo pasado las propiedades militares, con muchas de ellas sin uso. Entre los puntos más emblemáticos en manos del Ejército figuraban los terrenos de punta Herminia y los del monte de San Pedro. Ambos acabaron en manos del Ayuntamiento a raíz de un convenio firmado en 1984 y desarrollado en acuerdos posteriores, como el de la Maestranza en 1998.

Ya en el 84 se especificaba la edificabilidad en la Maestranza al tiempo que se reservaba una parte como suelo dotacional. Esos términos se concretaron con la cesión de la Comandancia al consistorio. Ya antes hubo más cesiones para viales. Faltaba la venta de tres parcelas, de las que dos acaban de encontrar comprador.

Aquel convenio especificaba también otros suelos de distintos cuarteles, con distinto final. El de la Maestranza, por ejemplo, acabó convertido en el Rectorado, y el de Macanaz, en la Fundación Luis Seoane.

Otros inmuebles de uso castrense acabaron también cambiándolo, como el antiguo Gobierno Militar, en la Ciudad Vieja, una parte del cual está ocupado hoy por un centro cívico y otra a la espera de nuevos usos.

En parte del cuartel de San Amaro se acabó edificando, igual que en los de Zalaeta y Corralón. Otras propiedades, como el hospital Abente y Lago, acabaron cambiando de manos y hoy es propiedad del Sergas, sin bien la cesión no fue gratuita y solo se firmó tras una negociación que acabó con el pago a Defensa de 6 millones de euros.