María Pita distribuye los servicios sociales por cinco centros cívicos

Xosé Vázquez Gago
Xosé Gago A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

MARCOS MÍGUEZ

La descentralización del sistema estaba pendiente desde el arranque del mandato

28 jul 2018 . Actualizado a las 10:58 h.

El próximo 17 de septiembre, el gobierno local pondrá en marcha la esperada descentralización de los servicios sociales, que estaba pendiente desde el 2015, cuando arrancó este mandato municipal.

La reforma del sistema, anunciada por el alcalde, Xulio Ferreiro, y la concejala de Xustiza Social, Silvia Cameán, redistribuirá los equipos Atención Inmediata; Valoración, Orientación e Información; Gestión de Prestaciones, y Educación y Apoyo Familiar por cinco centros cívicos.

Así, a partir del 17 de septiembre, las personas que son atendidas en Cuatro Caminos podrán acudir a los centros cívicos de San Diego y Elviña, y los atendidos en el Ágora tendrán disponibles los centros de Labañou y los Mallos. Finalmente, no habrá cambios en la atención social que presta el centro de Monte Alto.

Cameán detalló que cada uno de los centros cívicos dispondrá de un equipo formado por una profesional de atención inmediata, dos trabajadoras sociales -tres en los Mallos-, dos educadoras sociales en los Mallos, Monte Alto y Labañou y una en San Diego y Elviña, una directora y una auxiliar administrativa.

La responsable del área de Xustiza Social explicó que se ha optado por esos centros porque están ubicados en barrios «con gran densidade de poboación e con maior vulnerabilidade social».

El alcalde defendió que es «un novo paso nun modelo de proximidade no que xa levamos moito avanzado, para dar unha atención máis próxima (...) con máis axilidade e calidade na xestión».

Los responsables municipales señalaron que los cambios iniciados en el año 2015 se han traducido en una mejor atención a los ciudadanos. Ferreiro explicó que la espera media para una cita en servicios sociales era de 71 días por aquel entonces, mientras que en el 2017 había bajado a 24 días.

Esas cifras han sido discutidas por la oposición. El anteriores responsable de Servicios Sociales, Miguel Lorenzo (PP), ha denunciado que se presume de bajar las listas de espera, cuando los solicitantes son atendidos por personas «que no tienen capacidad para atender sus problemas».

Los choques entre Cameán y Lorenzo han sido habituales en este mandato. Ayer la actual titular de la concejalía y el alcalde señalaron que el modelo implantado por el PP, centralizando la atención social en el Ágora, Cuatro Caminos y Monte Alto, suponía romper con los criterios de «descentralización e proximidade» que marca la normativa.

También el PSOE y el BNG habían criticado la decisión de los populares de reagrupar esos servicios, y los tres partidos coincidían en la conveniencia de volver a distribuirlos por los distintos barrios de la ciudad. De hecho, el Bloque presentó varias iniciativas para instar al gobierno local a llevarla a cabo. A finales del 2016, los nacionalistas insistían en denunciar que no se había revertido la política del gobierno anterior, y en sus propuestas para los presupuestos de este año planteaban destinar 500.000 euros a la descentralización y refuerzo de los servicios sociales. Sin embargo, pese al acuerdo de hecho entre los tres partidos, esa medida no se materializará hasta septiembre, apenas ocho meses antes del fin del mandato y las elecciones municipales

La atención social ya absorbe más del 10 % de los fondos municipales y se prevé que aumente

A Coruña destina más de 26,4 millones de euros cada año a servicios sociales, lo que supone más del 10 % del presupuesto total del Ayuntamiento. El alcalde señaló que, según el Ministerio de Hacienda, el gasto por ciudadano es de 105,94 euros al año, casi el doble de los 64,83 euros de Vigo.

Aunque señaló que aún es temprano, el alcalde dio casi por seguro que esas partidas aumentarán durante los próximos años porque «segue habendo xente en situación de vulnerabilidade». Ferreiro insistió en la necesidad de reforzar esas partidas para evitar ser «cicateros» cuando las ayudas sean necesarias.

Entre los programas que han aumentado, la concejala Silvia Cameán señaló las becas comedor para menores, que han aumentado un 57 %. También creció el programa de comedores escolares en verano, que atendía a 24 niños en el 2015 mientras que en el 2017 fueron a 425. En el mismo período de tiempo, señaló, las personas beneficiadas por ayudas de emergencia social pasaron de 1.875 a 2.307, además han percibido la nueva renta social municipal 293 familias. También destacó la apertura del centro de baja exigencia de Monte Alto, por el que pasaron 167 personas el año pasado, o los 245 beneficiarios de acciones formativas de inclusión social, entre otros programas.