El lado oscuro asalta Galicia

GÓMEZ LONGO

A CORUÑA CIUDAD

Los fans de «Star Wars» pueden ver en esta muestra piezas insólitas

24 jul 2018 . Actualizado a las 16:42 h.

El reloj marcaba las 12 de la mañana e incondicionales de todas las edades se agolpaban en el centro comercial Marineda City de A Coruña para disfrutar de La Saga de las Galaxias. «¿Habéis visto las películas?», preguntaba un trabajador a los pequeños antes de que comenzar la exposición. «Sí, las han visto todas, al igual que los mayores», puntualizaba entre risas un padre.

Las puertas por fin se abrieron y con la banda sonora de John Williams de fondo un soldado imperial flanqueaba a los visitantes a la entrada de la muestra. Allí esperaba un ilusionado Daniel Prada, coleccionista madrileño que hoy comparte su afición por todo el mundo. «A los ocho años mis padres me tuvieron que mantener despierto durante toda una noche para que me realizaran un encefalograma. Me llevaron al videoclub buscando algún estímulo que me tuviera alerta y yo elegí la trilogía de Star Wars. Tenía que hacer caso al pesado de mi compañero de pupitre, Julito, que no paraba de hablar de Jedis y Siths», rememoraba.

Antes de sumergirse en el universo Star Wars, Dani, como prefiere que le llamen, enseña una de las figuras más icónicas de la historia del cine. «Os presento a un peculiar R2-D2. Está hecho de materiales reciclados. Es un guiño en contra de la basura electrónica», señala.

En la primera sala, los fans se frotaban los ojos. Piezas a escala 1:1 de las precuelas, en la que sobresalía imponente un piloto de caza que lucía, tal y como dibujara George Lucas, un casco que contaba con «una máscara de gas del ejército ruso». Y del pretérito al presente. Los visitantes seguían boquiabiertos a Daniel Prada que les mostraba, en una nueva habitación, el «Universo expandido de Star Wars», un salto a su gusto «necesario» en la Saga de las Galaxias para enganchar a las «nuevas generaciones». Incrédulos e impacientes los asistentes deseaban ver los emblemáticos sables láser de La Guerra de las Galaxias y el esperado momento llegó en la tercera estancia.

En la «sala de armería» infinitas réplicas de armamento hechas a mano valoradas en 2.500 euros y la joya de la corona: un blaster del largometraje Han Solo: una Historia de Star Wars utilizado por el actor Harrison Ford custodiado por una «máscara única en el mundo», la de Greedo muerto. Parecía que ya no habría más sorpresas, pero nada más lejos de la realidad. En la cuarta estancia aguardaba un Jawa de la Trilogía Original, a tamaño natural, que vestía «un cinto del ejército sueco de la Segunda Guerra Mundial usado en las películas». Y en la quinta, un Dewback «nunca visto en el mundo» en compañía de una pequeña figura mexicana de Biker Scout con un fallo de producción. Llegaba la hora de despedirse y los admiradores de la guerra intergaláctica no perdieron la oportunidad de retratarse con un Rancor de cuatro metros con el deseo en mente de «poder repetir la experiencia».

La Saga de las Galaxias, que estará en A Coruña hasta el próximo 23 de septiembre, se ha alzado en votación pública como la mejor exposición de Star Wars de España en 2017, y cuenta con más de 1.300 metros cuadrados «de exposición viva» en los que se recrean los planetas de las películas de George Lucas y se podrán ver más de 500 piezas exclusivas cortesía del coleccionista Daniel Prada.

Cosplay: Un soldado Imperial «diferente»

Un visitante fotografía la armadura modificada de un Soldado Imperial o Stormtrooper. La figura posee un casco que se inspira en una figura mítica de la cultura oriental: los samuray.

Dewback: una pieza única encargada por Prada

En la quinta sala de la exposición los visitantes pueden contemplar una obra única en el mundo. Se trata de un soldado imperial a lomos de un dewback. Es una de las joyas de la muestra.

Poblado Ewok, diversión en familia

En esta exposición no todo es mirar, también se puede tocar. Los más pequeños pudieron disfrazarse de Ewok.

Y para despedir la exposición...

Una de las figuras más espectaculares de la exposición es el Rancor de cuatro metros de altura. Otra figura totalmente singular.