El exalcalde marcó distancias en la rueda de prensa con Xulio Ferreiro ante los elogios del regidor
19 jul 2018 . Actualizado a las 11:54 h.Con exagerada y desacostumbrada alegría, por ser un rival político, la Marea Atlántica ha celebrado el nombramiento del socialista Javier Losada como delegado del Gobierno. Tras su entrevista del martes en María Pita, Xulio Ferreiro fue tan solícito con el exalcalde que Losada terminó por recordar a los periodistas que ambos forman parte de formaciones políticas distintas que tienen ideologías diferentes, aunque no ocultó que mantiene una buena relación personal con el alcalde de la Marea, que en estos años ha hablado con él varias veces de política, y que le agradece la deferencia que tuvo al colgar su retrato en la galería de alcaldes.
Más allá de esa amistad, el recibimiento de la Marea fue extrañamente cálido. El partido destacó en sus redes sociales que se había entendido el mensaje de la moción de censura contra el anterior Gobierno del PP. En la Red, el jefe de gabinete del alcalde, Iago Martínez, fue todavía más claro y afirmó que «no PSOE hai quen non soubo ler o que aconteceu o 1 de xuño [día de la moción] no congreso dos deputados (e porfía no erro) e hai quen si». El mensaje iba acompañado de una fotografía de Losada dando la mano a Ferreiro.
La consideración hacia el exregidor se dejó notar incluso en la nota de prensa del Ayuntamiento sobre el contenido del encuentro, que incluía un inusual número de declaraciones del exalcalde, casi más que de Ferreiro.
La Marea entiende que con Losada en la Delegación del Gobierno se solventará el futuro de los muelles interiores, el tren a Ferrol o la avenida de Alfonso Molina, temas que, aseguraron, el PP «tiña nun caixón baixo chave».
El PSOE local, que en numerosas ocasiones ha acusado a la Marea Atlántica de dificultar la puesta en marcha de esos proyectos para mantener una imagen de «victimismo» y «confrontación», se sumó a ese argumento. En un comunicado, el partido celebró «el cambio de talante» en las relaciones entre el Ayuntamiento y la Delegación del Gobierno; y aseguró que esperan que «ambas instituciones puedan trabajar conjuntamente» una vez que han desaparecido las «trabas relacionales provocadas por el anterior Gobierno del PP», al que acusaron de «falta de diálogo con el Ayuntamiento». Una falta durante los últimos años atribuyeron incluso con más frecuencia al gobierno local de la Marea.
El nuevo giro, al menos declarativo, en la relación entre ambos partidos, propiciado por el regreso de Losada a la primera línea política, contrasta con las votaciones del PSOE en contra de los últimos intentos de la Marea de cambiar el presupuesto o de abonar las abultadas facturas irregulares de los servicios sin contrato, y se produce a menos de 10 meses de unas municipales en las que parte de la militancia reclama un PSOE con perfil propio.