La calle Maestranza pasará a ser de sentido único hacia el Rectorado desde este miércoles

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA CIUDAD

CESAR QUIAN

Desde el próximo lunes los coches ya no podrán pasar por el casco histórico de A Coruña

19 jun 2018 . Actualizado a las 11:35 h.

El próximo lunes entra en vigor la segunda y última fase del plan de peatonalización de la Ciudad Vieja. Desde ese día los coches ya no podrán circular por el casco histórico de la ciudad, salvo los que tengan permiso para ello.

Podrán hacerlo todos los residentes para dejar y recoger personas y bultos, y también los repartidores en horario de carga y descarga, entre las seis y las once de la mañana.

El Ayuntamiento implementará antes de ese día algunos cambios en la circulación vinculados con la peatonalización. Así, desde mañana la calle Maestranza pasará a ser de sentido único. Solo se podrá emplear subiendo desde el hospital Abente y Lago hacia el Rectorado.

Esa modificación irá acompañada por otra en el paseo marítimo, desde el que se podrá girar a la izquierda hacia José Portela Ceballos, la vía que discurre entre la Hípica y los jardines de la Maestranza.

Esas variaciones en el tráfico afectarán también a la parada del autobús situada junto al Rectorado, que desde mañana a primera hora cambia de ubicación y se situará provisionalmente, informan desde el Ayuntamiento, en la bajada hacia el paseo en Portela Ceballos.

Desde el día 25 desaparecerán de las calles de la Ciudad Vieja cerca de 220 vehículos que hasta el momento tenían permiso para estacionar allí. La primera fase de la peatonalización, puesta en marcha durante el anterior mandato, supuso la prohibición de estacionar en el casco histórico a los no residentes. Esa medida retiró una gran parte de la circulación que había por la zona. Ahora se sacan también los coches de los residentes, que estacionarán en zonas reservadas del entorno de la Ciudad Vieja y en aparcamientos subterráneos bonificados. En principio no habrá ningún dispositivo de control de tráfico en los accesos, pese a que vecinos y comerciantes consideran que eso puede dar lugar a que sigan pasando coches.