Ayer leyó en el Palacio Municipal de María Pita su discurso de ingreso en el Instituto José Cornide de Estudios Coruñeses
25 may 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Se considera antes que nada intérprete, pero la relación de Antón de Santiago con la música abarca desde la docencia hasta la composición, pasando por el estudio y la crítica. Por todos estos méritos, ayer leyó en el Ayuntamiento su discurso de ingreso en el Instituto José Cornide de Estudios Coruñeses, dentro de la sección de música.
-Antes que nada, enhorabuena por su ingreso.
-Para mí, que soy un coruñés de toda la vida que se empeña en aportar lo que puede al mundo cultural de la ciudad, es un honor enorme que me hayan tenido en cuenta en el instituto.
-Ha dedicado su discurso de ingreso al papel de A Coruña en la música del Rexurdimento. ¿Tan relevante fue?
-Desde luego. Siempre ha sido una ciudad muy musical, desde el siglo XVIII, con la llegada del cantante italiano Nicola Setaro, que abrió un salón teatro donde ofrecía ópera. Fue la semilla de la afición por la ópera en A Coruña. La tradición musical de la ciudad tiene como base el folclore gallego, pero sobre esto se construyó un discurso de música culta y lo que podríamos llamar música nacionalista gallega, que es la cantiga lírica, a partir de la aparición de los textos de Rosalía y Curros y las aportaciones de músicos como Montes, Chané y Baldomir. Y no hay que olvidar que la ciudad cuenta con una de las sociedades filarmónicas más antiguas de España y la mejor orquesta sinfónica del Estado.
-Le puede la pasión...
-No, lo digo totalmente en serio. Pero con el discurso quiero destacar la importancia de la música clásica cantada en gallego, la cantiga lírica gallega, con ejemplos tan célebres como Negra sombra o Unha noite na eira do trigo. Yo debuté como intérprete con un monográfico de la cantiga lírica gallega, antes de cantar ópera, y zarzuela. Así que para mi es algo fundamental.
-Son canciones muy populares...
-Sí, pero son canciones líricas, las tienen que cantar cantantes líricos. Pucho Boedo cantó Unha noite na eira do trigo, es cierto. Pero ocurre como con la canción napolitana. ¿Recuerdas a Pavarotti cantando O sole mio? Me gustaría fomentar de alguna manera que los compositores actuales continúen escribiendo cantiga lírica gallega a partir de los textos de nuestros grandes poetas.
-¿Tiene claro su papel en el instituto?
-Estaré a lo que quiera el instituto, pero también realizaré mis propuestas, claro. De hecho, ya en el discurso lancé dos que creo que son importantes. Por un lado, un reconocimiento público al pianista y crítico musical Ramiro Cartelle. Y por otro, que la Orquesta Sinfónica de Galicia estrene la cantata Torre de Hércules, que ganó un concurso con motivo de la declaración de Patrimonio de la Humanidad, pero que nunca llegó a estrenarse. Así que como el año que viene se cumplen diez años de la declaración, sería un momento estupendo.