Lo han denominado Fitas de Vento y, aunque entre sus proyectos futuros más visibles se encuentra llevar a cabo un mercadillo, la iniciativa va mucho más allá. El jueves se celebró un encuentro de los participantes en esta peculiar iniciativa que conjuga solidaridad con educación, y a la que se han apuntado ya equipos educativos y familias de las escuelas infantiles municipales Arela, Os Cativos y Monte Alto, además del ciclo de infantil del colegio Santa María del Mar. En síntesis, Fitas de Vento es «un espacio de intercambio docente entre escuelas gallegas y africanas», resume Susana Vázquez, profesora de Jesuitas e impulsora de este proyecto nacido en la primavera del 2017 e inspirado por su visita a África. Poco a poco han ido llevando a cabo distintas actividades y ya se han hermanado con la Escolinha Cei Aman, en Tete (Mozambique). Comparten todas sus propuestas a través de un blog, donde exponen ideas, recursos y experiencias que «pueden ser motivo de aprendizaje e intercambio». Todos los centros apuntados forman parte además del programa de educación medioambiental Voz Natura, con el que comparten además la inquietud por el cuidado del planeta, y en la reunión del jueves uno de los proyectos de los que se habló fue precisamente de la posibilidad de llevar a cabo un mercadillo solidario con los productos de la huerta en la Praza da Fariña. El agradable encuentro contó con una actuación musical a cargo de algunos padres interpretando, como era oportuno, la canción que da nombre a este fructífero y solidario interés compartido.